Un herido tras un aparatoso choque en la N-234

F.L.D.
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La colisión frontolateral se produjo a la altura del kilómetro 429, a la salida de Pinilla de los Barruecos. Uno de los coches siniestrado era un retén de incendios

Los dos vehículos implicados sufrieron notables daños. - Foto: B.A.

La carretera de Soria volvió a ser el escenario de un aparatoso choque frontal entre dos vehículos. Por suerte, y a pesar de que este trazado podría haberse teñido de negro una vez más, no hubo que lamentar víctimas mortales. Un hombre de 74 años tuvo que ser atendido y posteriormente trasladado al Complejo Asistencial de Burgos debido a las heridas causadas por el golpe entre su todoterreno y una ‘pick up’ de los servicios medioambientales de la Junta de Castilla yLeón a la altura de Pinilla de los Barruecos. 

Una llamada al centro de emergencias 112 de Castilla y León alertó poco antes de las dos de la tarde de que dos turismos habían colisionado en el cruce de entrada de la localidad, en el kilómetro 429 de la N-234. Uno de los vehículos implicados era un retén de incendios de una subcontrata del servicio regional de Medio Ambiente. La sala movilizó a la Guardia Civil de Tráfico, al Sacyl y a los Bomberos de Burgos por si era necesario excarcelar a alguno de los heridos. 

Finalmente el conductor del otro vehículo siniestrado pudo salir por su propio pie a pesar de sufrir varias contusiones por las que tuvo que ser atendido in situ por personal sanitario del centro de salud de Salas de los Infantes y posteriormente trasladado en soporte vital básico al Hospital Universitario de Burgos. Los Bomberos de la capital se encargaron de retirar todos los restos de la calzada, que quedó completamente limpia a las pocas horas. 

A pesar de estar señalizado varios metros antes y de que la velocidad máxima en ese punto es de 60 kilómetros por hora, el cruce en el que se produjo la colisión resulta complicado para los vehículos que salen de la localidad de Pinilla de los Barruecos. Está en el medio de dos tramos curvos, lo que reduce la visibilidad, y los coches no suelen respetar los límites. 

La N-234 es una de las carreteras más peligrosas de la provincia. No hay que olvidar que el pasado año perdieron la vida cinco personas, tanto en colisiones frontales por adelantamientos irregulares, como en  accidentes contra las arquetas de los arcenes. Los alcaldes de varios pueblos han pedido soluciones para este tipo de alcantarillados de cara a reducir la mortalidad de esta carretera, que en cierta manera ha tomado el testigo de la N-I en cuanto a ‘puntos negros’ tras la liberación de la AP-1.