La normalidad vuelve también poco a poco a los centros cívicos. Al menos así se desprende del número de inscripciones para participar en alguna o varias de las 200 actividades que ofertan tanto para adultos como las dirigidas a la infancia en el primer cuatrimestre (octubre a enero). De las 8.700 plazas ofertadas se han logrado cubrir 7.786, de las que 5.744 son de adultos y 2.042 de menores. Han quedado libres cerca de 900 pero se está dando la posibilidad de matricularse esos días antes de que arranque el curso aunque haya finalizado el plazo.

La concejala de Servicios Sociales, Sonia Rodríguez, se muestra satisfecha con la respuesta de los burgaleses, dado que aunque no se ha llegado a niveles prepandemia, en los que había 12.600 inscripciones, se han duplicado las matrículas respecto al mismo cuatrimetre de 2020 en el que se registraron 4.300. «Es cierto que las plazas que se ofertan no son las mismas, dado que tenemos que seguir respetando los 1,5 metros de distancia y el uso de mascarilla pero estamos contentos con que poco a poco se vuelva a la normalidad», señaló.

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