La magia del siglo XXI

Carlos Cuesta (SPC)
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La introducción de la inteligencia artificial en los nuevos procesos productivos marca el liderazgo y el nivel de rentabilidad empresarial

La magia del siglo XXI

La carrera mundial por dominar la economía ya no depende solo de las grandes empresas y de las multinacionales que se han venido expandiendo tradicionalmente en los mercados más importantes del planeta y han sido las que han generado los mayores beneficios, las que, incluso, han monopolizado los sectores en los que desarrollan sus actividades y las que más empleo y riqueza han generado. Actualmente, existe una guerra comercial, de la que se habla muy poco, que está liderada principalmente por China y Estados Unidos, que no solo busca ocupar los primeros puestos en los ranking de las mayores corporaciones, sino que su objetivo es dominar el futuro con una tecnología que se anticipa a la demanda de los consumidores y que, además, ofrece servicios y crea necesidades que nunca antes han existido con crecimientos exponenciales en sus resultados anuales gracias al uso de algoritmos e inteligencia artificial que, sin ninguna duda, es la magia del siglo XXI.

Se trata de una herramienta que está cambiando drásticamente el entorno empresarial y todo el funcionamiento en su dimensión productiva, organizativa, comercial, incluso, de crecimiento y en la forma de relacionarse con  sus clientes, proveedores y trabajadores.

Es, sin duda, el instrumento más importante de nuestro tiempo y el responsable de empoderar a las compañías que lo aplican correctamente y que, además, es capaz de mantenerse a la vanguardia de todos los avances que se están produciendo, generando oportunidades de negocio en sectores que nunca antes habían destacado.

Gracias a la inteligencia artificial se pueden acelerar y optimizar los procesos productivos y logísticos debido a que casi todas las tareas se pueden realizar de una forma más rápida, eficiente y económica. 

El cambio se está produciendo a tal velocidad que es muy posible que muchas compañías se queden obsoletas y fuera del sistema si no son capaces de adaptarse a la nueva realidad e invertir sus recursos en la digitalización con la que enfrentarse a sus competidores.

Según un estudio publicado recientemente por el consultor finlandés sobre inteligencia artificial, Lasse Rouhiainen, esta tecnología podría generar 13 billones de dólares adicionales para el año 2030, aumentando el PIB mundial en un 1,2% cada año. Asimismo, las empresas podrían elevar un 38% y disparar los niveles de empleo hasta un 10% entre 2018 y 2022.

En este sentido, el 65% de las empresas españolas tiene proyectos relacionados con la inteligencia artificial, pero solo el 20% ha avanzado más allá de las fases iniciales de pruebas, lo que significa una falta de capacidad inversora y de motivación para competir con las grandes multinacionales que se expanden y dominan en todo el mundo. 

Según un análisis realizado por la multinacional de informática Microsoft y la consultora Ernst Young, el 95% de las sociedades españolas espera que la inteligencia artificial optimice sus operaciones en formas como la automatización de tareas, la previsión de la capacidad y la demanda de los consumidores, en definitiva, que mejore y simplifique sus procesos incrementando la rentabilidad y reduciendo sus costes.

Los expertos consideran que se trata de un campo que evoluciona a pasos agigantados, con constantes actualizaciones y con nuevas aplicaciones cada vez más desarrolladas en todos los sectores y actividades, lo que la hace ser una de las tecnologías más trascendentales e importantes del siglo XXI y, posiblemente, la que mayores inversiones acapare en el mercado mundial en el corto y medio plazo.

El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia contra la COVID-19 que ha presentado el Gobierno de España a la Unión Europea destinará 500 millones de euros en el fomento de la inteligencia artificial, una cifra que se podría disparar hasta los 2.000 millones de euros contando la inversión privada.

En este sentido, el retorno que espera alcanzar el Ejecutivo supera los 3.171 millones de euros sobre el PIB durante los años 2021, 2022 y 2023. 

Empleo

Según los analistas económicos, el desarrollo de este moderno mecanismo en el entorno empresarial prevé crear una media entre 40.000 y 60.000 puestos de trabajo anuales hasta 2023, una cifra que se verá incrementada a medida que la mayor parte del tejido productivo nacional la vaya introduciendo en sus sistemas. Solo en 2021 se calcula que se van a necesitar 29.000 empleos para afrontar el volumen de trabajo que se está demandando, especialmente, en el sector financiero y en las grandes corporaciones.

Otros factores que van a propiciar un avance sin precedentes en esta materia se fundamentan en la apuesta por la I+D+i en aplicaciones de inteligencia artificial en lo relativo a la captación de talento, la integración en las cadenas de valor y la necesidad de contar con sistemas de almacenamientos de datos preparados y que se ajusten a los objetivos de desarrollo sostenible.

Según una reciente publicación de la International Data Corporation, el gasto en inteligencia artificial se va a duplicar en los próximos años en España. Así, solo entre 2020 y 2024, se espera pasar de los 42,3 millones de euros a los 93 millones. 

Las empresas buscan ser más ágiles e innovadoras con el objetivo de brindar una experiencia al cliente más gratificante y ayudar a los usuarios a desempeñar mejor sus funciones. En definitiva, quieren hacer la vida un poco más fácil con un nivel de servicios lo más personalizado posible. 

El mayor problema que existe en la actualidad para desarrollar esta tecnología con plena eficacia es la recogida de información, puesto que se necesita un conjunto de datos demasiado grande y complejo. Y no solo eso, sino que después debe haber una clasificación y un equipo humano que aplique un algoritmo que debe ser lo más objetivo posible para que no entren en juego problemas éticos o de sesgos raciales.