23 kilómetros más que en la ciudad para acceder a servicios

David Alonso
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Un informe del Banco de España revela las grandes diferencias en la accesibilidad a escuelas, bibliotecas o centros de asistencia sanitaria que existen en función del lugar de residencia

Imagen de un bus que traslada población rural en la provincia de Burgos. - Foto: Alberto Rodrigo

Hasta veinticinco kilómetros. Esta es la distancia que tienen que recorrer, de media, los habitantes de las zonas rurales de Castilla y León para poder acceder a servicios locales como bibliotecas, escuelas infantiles o centros de asistencia sanitaria. El endémico problema de la despoblación en la Comunidad se está viendo agravado por la enorme dispersión territorial de una de las regiones más grandes de toda Europa, donde sus casi 100.000 kilómetros cuadrados dificultan en exceso el uso y disfrute de servicios básicos. De hecho, los habitantes de las zonas urbanas de la Comunidad apenas tienen que recorrer dos kilómetros para tener acceso a esos mismos entidades o establecimientos. Esto supone que la población de las zonas rurales se desplaza hasta doce veces más lejos que los de las ciudades para poder visitar una biblioteca, una escuela o un centro sanitario. Una problemática de sobra conocida pero a la que ahora el Banco de España ha puesto cifras en su informe ‘El acceso a servicios en la España rural’, que revela como las áreas rurales en España presentan una peor accesibilidad a servicios locales que sus homólogas europeas, mientras que las diferencias no son significativas en el caso de las urbanas.

En comparación con la media española, donde la población rural se desplaza unos 22,6 kilómetros, y la urbana 2,16, las diferencias se agravan, toda vez que los habitantes de los pueblos de la Comunidad recorren más distancia (unos tres kilómetros), y los de las ciudades menos (200 metros). Castilla y León es, en cualquier caso, la tercera región con mayores diferencias para el acceso a estos servicios entre zonas urbanas y rurales (24,6 kilómetros), solo superada por Castilla-La Mancha (32,64 kilómetros) y Aragón (28,30). En el polo opuesto se encuentran, como era de esperar, zonas como Murcia (2,84 kilómetros), Baleares (3,37) o Madrid, que no llega a 10 kilómetros de diferencia.

Llama la atención como en otras comunidades con el mismo problema de despoblación y de una extensión de terreno similar a Castilla y León, como puede ser Galicia, los habitantes de las zonas rurales tiene que recorren hasta 10 kilómetros menos (14,68), y las diferencias de desplazamiento entre zonas urbanas y rurales son la mitad que en el caso de la Comunidad.

Déficit de accesibilidad

De acuerdo con el estudio, existe un déficit en la accesibilidad a servicios de los municipios rurales frente a los urbanos dentro de cada comunidad autónoma. Asimismo, se observan algunas idiosincrasias en la geografía y en la fiscalidad de los municipios rurales que podrían explicar, al menos en parte, dicho déficit. En cuanto a la situación de las provincias españolas en perspectiva europea, los resultados indican que la accesibilidad a servicios en España se sitúa en línea con la del resto de los países europeos. En concreto, el ciudadano medio en España ha de recorrer 3,5 km para acceder al servicio local más cercano, frente a los 4 km que debe desplazarse el ciudadano medio en el resto de los países de la UE.

Respecto a las diferencias entre municipios en España, se observa un déficit significativo en la accesibilidad a servicios de los municipios rurales respecto a los municipios urbanos. La facilidad en el acceso a servicios por parte de los ciudadanos de un país o de una región puede considerarse un indicador de su grado de desarrollo económico y social. 

La peor accesibilidad de las regiones rurales es especialmente elevada en el caso de España, en particular en lo que se refiere al acceso a servicios locales. Según se constata en el estudio, las mayores dificultades de acceso a los servicios locales que tienen que afrontar los residentes en los municipios rurales en España se explican, al menos en parte, por factores orográficos y fiscales.

En particular, el diferencial rural-urbano en accesibilidad a servicios se ve aminorado cuando se tienen en cuenta estas características de los municipios, que son claves. No obstante, la importancia relativa de estos factores difiere según el tipo de servicio. 

En concreto, la brecha rural-urbana en el acceso a servicios digitales es muy significativa incluso al tener en cuenta las diferencias en factores como la geografía y la fiscalidad municipal.