La Federación de empleados de servicios públicos de UGT (FeSP-UGT) ha criticado el abandono del Laboratorio Regional Agrario de Burgos por parte de la Consejería de Agricultura y Ganadería. En concreto, denuncia la necesidad imperiosa de cubrir, por Bolsa de Empleo en vigor, los puestos de personal Administrativo del centro, una urgencia que deviene de la jubilación del único administrativo el 20 de julio.
A partir de entonces, se anulará la comunicación con proveedores y clientes, pues no se podrá dar entrada a las muestras, ni salida de los resultados, lo que supondrá la paralización absoluta de la actividad en el laboratorio.
Según lo ha descrito el sindicato a través de un comunicado remitido a Europa Press, se trata de un laboratorio oficial de referencia y "puntero" en España que se encarga de analizar las muestras recogidas en inspección de campo en materias de control medicamentos y sustancias prohibidas en piensos y agua, análisis de plaguicidas en piensos, vegetales de consumo humano y suelos y control de fraude en la composición de piensos y fertilizantes minerales.
Esto supone, según ha indicado UGT, la "columna fundamental" de la seguridad alimentaria en Castilla y León y la protección frente al fraude de la producción de los productores primarios y empresas agroalimentarias de la Comunidad.
Todas las pruebas analíticas cumplen legislación vigente, tiene acreditación de ENAC y alcanza un número aproximado de 250 sustancias con posibles efectos negativos para la salud, lo que le convierte en "uno de los laboratorios acreditados con más amplia cartera de toda España".
Además, este laboratorio ha sido receptor de importantes inversiones públicas en estructuras y equipo, que han permitido que sea "puntero", con un gasto aproximado de 4 millones de euros en los ocho últimos años.
Esta inversión y servicio, "imprescindible" para la sociedad de Castilla y León, y de forma especial para su medio rural, "peligra por la negativa de la Consejería de Agricultura y Ganadería para dotarlo del personal suficiente", critica UGT.
Este abandono de los productores de Castilla y León, de la calidad de la producción agraria y de la seguridad de la salud de los castellanos y leoneses, "no tiene explicación posible a menos que lo que esta Consejería pretenda sea favorecer el fraude alimentario o desmantelar este laboratorio, con consiguiente sobrecoste para las arcas públicas", concluye el sindicato.