Carmen Hernando

Desde la campiña

Carmen Hernando


Quedaos en España

26/11/2021

Si sois de los que les gusta viajar y ya os está picando el gusanillo de experiencias nuevas en otros países, después de una pandemia entera sin salir de España, os lo digo ya: no os lo aconsejo. Al menos no fuera de la Unión Europea. Esperad un poco.

A mí se me ha ocurrido planificar un viaje a Reino Unido, ese país que fue socio de la UE desde mucho antes que nosotros, pero que nunca se sintió cómodo en la misma, como demuestra el hecho de que jamás quisiese adoptar el euro como moneda, por ejemplo. Pues bien, está siendo toda una odisea.

Para empezar, desde el 1 de octubre el DNI ya no es un documento válido para viajar a este país, así que toca sacar el pasaporte para aquellos miembros de la familia que todavía no lo tienen. Pero la gran dificultad viene con el tema covid. En principio, la información que figura en las páginas web de aerolíneas, de información general o incluso del gobierno del Reino Unido, es que el pasaporte covid es válido para viajar a este Estado.

Ahora bien, en este último portal, por supuesto en inglés, y dentro de una maraña de datos en la que encontrar algo es misión imposible, hay una frase que dice: aquellos que hayan pasado la covid y hayan recibido una sola dosis de una vacuna de dos dosis deben seguir las normas vigentes para los no vacunados. Toma ya: PCRs varias, cuarentena… todo el lote. Y se quedan tan anchos. ¿Pero no era válido el pasaporte covid? Pues nada, otro pinchazo. Si total, nos van a poner uno cada seis meses… Pero no es eso. ¿Quiénes son ellos para decirnos a la UE que algunos de nuestros pasaportes covid sirven, y otros no? Porque de EEUU nos lo esperábamos, pero del Reino Unido… yo, que soy bastante inocente, no lo sospechaba. 

Del resto del papeleo, incluido test de antígenos, formulario de localización en Reino Unido, otro formulario de control sanitario para poder volver a nuestro país… mejor ni os hablo.

En resumen, que no tengáis prisa. España es un país precioso, que tiene playas, montañas y monumentos para dar y tomar. Y por supuesto, se come mucho mejor que en ningún otro sitio. Que en Londres, desde luego.