El mercado inmobiliario de Aranda de Duero sigue dejando datos alcistas e incluso supera al de ciudades y municipios como Soria, Miranda de Ebro y Medina del Campo. La capital de la Ribera registró 486 transacciones de viviendas durante 2018. En el mismo año, la ciudad de Soria contabilizó 449 operaciones, Miranda de Ebro, un total de 367, y Medina del Campo, 152. Los datos dibujan un buen estado del sector inmobiliario arandino teniendo en cuenta que tiene más actividad que dos municipios con mayor población, Soria, con cerca de 6.000 habitantes más, y Miranda de Ebro, con casi 3.000 empadronados más.

Los datos del mercado inmobiliario de Aranda de Duero también confirman un crecimiento continuado a lo largo de los últimos años. Las 486 compra-ventas de viviendas registradas durante el pasado 2018 en la capital de la Ribera son 66 más que las registradas en 2017. Esto da continuidad a una tendencia consolidada y que en 2017 experimentó uno de sus mayores saltos con un incremento de las transacciones del 77%, dejando muy atrás las 242 compras de hogares sumada en 2016.

La evolución positiva de las operaciones inmobiliarias en Aranda hace que las cifras actuales ya rocen los niveles precrisis, cuando en la capital ribereña se contabilizaban más de 500 ventas de pisos anuales. En 2011 se produjo el mayor desplome de la crisis, bajando la compra de casas un 74%, hasta las tan solo 138 operaciones.

Hoy el sector inmobiliario, por lo menos en cuanto a compra-ventas de viviendas, ha remontado en Aranda y en lo que va de año los datos están dentro de la media de los tres últimos ejercicios. En los dos primeros trimestres de 2019, la villa ha acumulado 246 transacciones, son 48 más que en el mismo periodo de 2016 y 38 menos que en 2018, cuando todo hacía prever que se superaría la barrera precrisis de las 500 adquisiciones. Sin embargo, la falta de regularidad entre meses hizo fallar el pronóstico.

El elevado precio de los alquileres en Aranda es otro de los factores que empujan a la compra de viviendas. En este sentido, el perfil de los nuevos propietarios varía desde parejas jóvenes hasta personas mayores de poblaciones de la comarca. En cuanto al precio de los hogares, la media de un piso familiar en la villa oscila entre los 80.000 y los 160.000 euros.