Es evidente que la ausencia de carriles habilitados para ciclistas y la falta de concienciación de algunos conductores han obligado a este colectivo a ‘invadir’ la acera para poder circular. Lo mismo les ha pasado a los usuarios de patinetes eléctricos, un medio de transporte que está proliferando no solo en nuestra ciudad, sino en toda España. Este aumento ha pillado en pañales a los legisladores sobre dónde deberían circular, a qué velocidad y, por supuesto, cómo se debería sancionarles en caso de infracción. La situación de alegalidad perjudica también al peatón, que ha visto su espacio ocupado por estos vehículos y que, para colmo, en caso de atropello, el accidente queda impune.

La mujer de 37 años que el pasado lunes fue arrollada por un patinete eléctrico en la Avenida del Cid cuando caminaba tranquilamente por la acera, tendrá que denunciar y, por tanto, acudir a la vía penal, si quiere que el atropello sufrido tenga una sanción. Y es que, a pesar de que tras el incidente la unidad de atestados de la Policía Local acudió al lugar de los hechos, los agentes solo pudieron tomar declaración de las partes y realizar un informe sin poder multar al conductor del vehículo de dos ruedas. Eso es todo lo que pueden hacer a día de hoy las fuerzas del orden, que no son ajenas a la «alarma social» que se está generando en las aceras de la ciudad, pero que delegan la responsabilidad en los legisladores, ya que no solo no existe una Ley de Seguridad Vial que los catalogue a nivel nacional, sino que, recuerdan desde el cuerpo municipal, la Ordenanza de Movilidad aún no está aprobada.

En el caso del atropello del pasado lunes, el informe realizado por los agentes permanece en la sede de la Policía Local, ya que este tipo de casos solo pueden derivarse a la Fiscalía como atestado en caso de lesiones de la víctima. Fuentes del 112 informaron de que la mujer arrollada sí necesitó de atención sanitaria en el lugar del accidente por una serie de contusiones por las que finalmente fue trasladada al Hospital Universitario y dada de alta horas más tarde.

Sin embargo, la víctima aseguró que el golpe le reavivó un dolor de espalda derivado de una hernia discal sufrida con anterioridad, lo que hace prever que deberá acudir en primera instancia a la sede de la Policía Local para cursar la correspondiente denuncia e iniciar de esta manera una carrera judicial contra la autora del atropello.