En la tarde de ayer fallecía el presidente de Cajaviva Caja Rural, Pedro García Romera, a los 78 años de edad. Llevaba cuatro décadas al frente de esta cooperativa de crédito. En ese periodo llegó a ocupar la presidencia de las Cajas Rurales de España y de la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito. Su trayectoria profesional no se limitaba a dicha entidad. A lo largo de su vida, García Romera llegó a forjar un destacado currículum como profesional del Derecho (como abogado del Estado y en el ejercicio privado de la profesión). Soriano de nacimiento, estudió Derecho en Zaragoza y en 1962 se licenció con sobresaliente. Tras pasar por Ceuta y Cádiz llegó a Burgos en 1971, al despacho de José María Concejo. A defender los intereses del Estado en la provincia se dedicó de 1971 a 1993, año en el que se decantó por la práctica del derecho privado. Salvo los dos primeros, el resto de esos ejercicios fue el jefe de la Abogacía del Estado en Burgos.
También fue presidente de la Fundación Atapuerca desde que se creó en 1999 hasta 2013, cuando cedió el testigo a Antonio Méndez Pozo.

Su fallecimiento también ha causado un hondo pesar en Diario de Burgos y en el grupo Promecal. Ocupó durante varios años la Presidencia del consejo de administración del periódico decano de la prensa provincial. Desde ese puesto vivió las principales transformaciones tecnológicas acometidas por el rotativo. Una de sus hijas, Beatriz, es trabajadora de este grupo de comunicación.

Pedro García Romera recibió numerosos reconocimientos profesionales, entre ellos la Medalla de Oro del Colegio de Abogados en 2012 por sus 40 años de trayectoria profesional. Fue en un emotivo acto que se celebró en el Monasterio de San Juan.

García Romera era un apasionado del Imperio Romano y del Derecho Romano. Viajero empedernido, en una entrevista reciente en Diario de Burgos presumía de haber estado prácticamente en todo el mundo. Tan solo le quedaba por conocer Australia y Nueva Zelanda.
Deja viuda, dos hijas y dos nietos.

Descanse en paz.