Los afectados por el incendio de Ávila cobrarán la PAC

SPC
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La Junta da por estabilizado el perímetro del fuego de Navalacruz durante la jornada de ayer, pero los medios siguen pendientes de posibles reproducciones

La ganadera Tamara Jiménez y su hermana tras recuperar dos novillas que habían huido tras el incendio. - Foto: Miriam Chacón (Ical)

Tras conseguir estabilizar el perímetro del incendio forestal declarado el pasado sábado en Navalacruz (Ávila), la Junta ya trabaja en paliar las consecuencias del mismo y ha garantizado a los agricultores y ganaderos afectados por las llamas que cobrarán las ayudas de la PAC, mientras que se prepara un plan de restauración de la zona.

Los responsables de las organizaciones agrarias trasladaron ayer a la directora general de Desarrollo Rural, María González, y al delegado territorial de la Junta en Ávila, José Francisco Hernández, las necesidades de los ganaderos y agricultores afectados por el incendio. González confirmó que «la prioridad es dar una respuesta inmediata a la ganadería para garantizar comida y agua a los animales y, en cuanto sea posible, se hará una valoración de los daños para poder ayudar a los profesionales en lo que sea necesario».

González se comprometió a garantizar «en cuestión de horas» el suministro estable de agua y alimento para el ganado en toda la zona afectada por el fuego. También señaló que se podía «garantizar el pago de las ayudas de la Política Agrícola Común (PAC)».

En la reunión se diseñaron actuaciones que se llevarán a cabo de manera inmediata y se informó de la constitución de una mesa de trabajo con presencia de los consejeros de Agricultura y de Fomento y Medio Ambiente para articular los mecanismos de ayuda al sector primario, con 409 ganaderos, 35.756 cabezas de ganado en 12 localidades pertenecientes a cuatro unidades veterinarias como potenciales beneficiarios.

Hernández Herrero aseguró que se trabajará en la «rápida restitución de todo lo deteriorado por el incendio, como instalaciones y suministros de agua» y subrayó el compromiso de la Junta de “inmediatez en las soluciones a los ganaderos».

Sin puntos activos.

El incendio quedó estabilizado ayer, aunque los efectivos y medios que luchan contra el fuego continuaban al cierre de esta edición en la zona para evitar su regeneración y que se aumenten los daños económicos, sociales y ambientales de unas llamas que se iniciaron el sábado cuando un vehículo empezó a arder en la carretera N-502.

La Junta de Castilla y León decidió mantener el nivel 2 de peligrosidad en la escala de 0 a 3 y el despliegue de equipos de extinción de incendios y medios materiales en la zona ante las elevadas temperaturas que aún se registraban como coletazos de la ola de calor, el viento y ante el peligro de una regeneración de algunos puntos de fuego debido a la gran extensión de la zona calcinada.

La Consejería de Fomento y Medio Ambiente está valorando los daños para la puesta en marcha de un plan de restauración forestal, según anunció la Junta, en el que se dará prioridad al restablecimiento de pastos para la ganadería, la protección de los acuíferos y la captación de agua de las poblaciones.

De momento se desconoce la cifra exacta de superficie afectada por las llamas, aunque el sistema Copernicus estima que es de 22.723,3 hectáreas, según la medición hecha el pasado martes a las 20.55 horas. Copernicus es un sistema satelital europeo que ofrece varios productos como información en emergencias, lo que permitirá ver la magnitud y afección del fuego.