De la Varga seguirá 2 años más al frente de los hosteleros

B.G.R.
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Cambia el turno de alternancia de mandato con los hoteleros por la covid. Solo hubo una candidatura

Fernando de la Varga y Luis Mata, presidente y vicepresidente de la Federación Provincial de Hostelería. - Foto: Luis López Araico y Patricia

Las consecuencias de la pandemia en el sector, con continuas medidas restrictivas que acabaron en un cierre obligado de bares y restaurantes, han hecho que las elecciones de la Federación Provincial de Hostelería hayan pasado desapercibidas. A ello se suma que no ha sido necesario un proceso de votaciones debido a que tan solo se ha presentado una candidatura, en la que repiten la mayoría de los nombres de la de hace cuatro años.

Fernando de la Varga continuará dos años más al frente de la patronal, cambiando así la alternancia de la Presidencia que rige en la entidad y que debería haberle correspondido al representante de los establecimientos de hospedaje, Luis Mata, que continuará durante este tiempo ostentando la vicepresidencia. La decisión se debe, según explica el primero, a la situación actual motivada por la pandemia, en la que ha encabezado las  conversaciones tanto con los empresarios como con las distintas administraciones públicas. 

«Se trata de continuar en la misma línea por el momento actual y con el objetivo claro y contundente de empezar a trabajar y de reivindicar un línea de ayudas directas para intentar salvar el mayor número de empresas posible», subraya. De la Varga tomó el relevo de Enrique Mata en noviembre de 2019, después de que este presentara su dimisión justo un año después de haber llegado al cargo.

La junta directiva de la Federación, formada por 17 personas, contará con tres nuevos representantes para los próximo cuatro años. Se trata de Isabel Álvarez, del restaurante Maricastaña; Pedro Ángel Alonso, Bar San Pablo, y Enrique Seco, El Soportal. Además, también están integradas las asociaciones Asohar, de Aranda de Duero, y Altamira, de Miranda. 

La patronal tiene la intención de seguir sumando representantes como es el caso de la agrupación Burgos Sale, mientras que está en trámites de la adhesión de la Asociación de Hostelería de Las Merindades y mantiene también contactos con la de Roa.  Todo ello con el fin de conseguir una «entidad fuerte que pueda llegar más lejos en la defensa del sector».