Toca adaptarse a las nuevas circunstancias y el deporte burgalés vive la crisis del coronavirus sin mirar más allá del día siguiente, motivo por el que los clubes no hacen planes. Es el caso del Burgos CF, que tiene previsto su regreso al trabajo el lunes. Esa fue la decisión que la entidad y el cuerpo técnico tomaron el pasado jueves, aunque será mañana cuando tomen una resolución definitiva. La situación ha cambiado en los últimos días y las medidas se han extremado.

«El Burgos CF está viviendo esto con la mayor responsabilidad posible porque como ya indicó la OMS se trata de una pandemia. Hay que tomar todas las precauciones posibles y les hemos dicho a los trabajadores del club que sean responsables,  que traten de ser prudentes», explica Franco Caselli, presidente del club.