Segundo año consecutivo en el que el concurso general en la Policía Nacional -el que oferta traslados para la plantilla de toda España- resulta favorable para la provincia de Burgos. Se trata de una propuesta todavía, pero la convocatoria oficial que publique el Ministerio del Interior no distará mucho de la avanzada a los sindicatos policiales, según adelanta el representante del SUP en este territorio. Así, está previsto que en la Comisaría de la capital salgan 24 vacantes, 20 para agentes, dos para oficiales y otras dos para subinspectores. En Aranda de Duero prevén cubrirse 3 plazas de policía, mientras que para Miranda se reservan dos para subinspector y tres para agente.

¿Qué representa para la provincia la incorporación de estos 32 efectivos? Pues que una plantilla que está cubierta en estos momentos al 80% -quizá algo menos- lo esté al 86% aproximadamente, un incremento muy sustancial, que permitirá reforzar distintos servicios. Habrá que esperar a ver cómo quedan las distintas unidades tras la resolución del concurso, pero en un principio lo lógico, apuntan desde la Comisaría, es que se refuercen las áreas de Seguridad Ciudadana y Judicial.

La llegada de los nuevos agentes, que se produciría en torno al mes de junio, tiene lugar en un momento, es verdad, en que la delincuencia está bajando como consecuencia de las restricciones de la pandemia, pero no así el trabajo de la Policía Nacional. Las innumerables normas que hay que aplicar como consecuencia de toques de queda, prohibiciones de movilidad y apertura de establecimientos, y el control de mascarillas han multiplicado las tareas de la Comisaría, sobre todo en Seguridad Ciudadana, donde también se incrementan los servicios humanitarios asociados al coronavirus.

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