Alimentación y metal lideran los contratos en la Ribera

LETICIA NÚÑEZ
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La mayoría de firmas no prevé agrandar la plantilla, pero tampoco hacer recortes

A principios de este año, Tecnoaranda incorporó a otros 21 trabajadores, que elevan su plantilla hasta los 314 empleados. - Foto: J.C.O.

Dos sectores mantienen el pulso de las contrataciones en la Ribera del Duero en plena pandemia de coronavirus: metal y alimentación. En el primero, empresas como Tecnoaranda tiran del carro con 21 incorporaciones en enero y otras diez previstas hasta marzo. En el segundo, destaca la demanda de operarios, carretilleros, promotores comerciales, cajeros, mozos de almacén, preparadores de pedidos que llegan vía online o controladores de aforo en supermercados, fruto de los nuevos hábitos de consumo que ha creado la covid. 

No obstante, estos dos sectores actúan como pequeños oasis en medio de la incertidumbre. La fotografía fija que arroja el mercado laboral ribereño en estos momentos está marcada por la falta de certeza. Y esa inseguridad se traduce en que la mayoría de empresas no tiene previsto aumentar su plantilla a corto plazo. 

«Se ha producido una caída de las contrataciones de entre un 5 y un 10% respecto a 2020. Sin embargo, la mayoría de sectores industriales son optimistas a partir de marzo», asegura Eva Franco, directora de Adecco en la provincia de Burgos. Mientras que hostelería y turismo viven su peor momento por las restricciones para frenar los contagios por coronavirus, otros como el ecommerce, la logística, distribución y alimentación crecen «rápidamente». Pero en muchos casos lo hacen a través de contratos temporales. En este sentido, una compañía de la industria alimentaria sostiene que «ahora es muy complicado hacer un contrato fijo a no ser que haya jubilaciones».En su caso, se limitan a emplear a través de ETT en función de los pedidos que reciban. 

El que mantiene su fuerza es el sector del metal en Aranda. «La industria no ha parado tan en seco como otros sectores en esta segunda ola y sigue teniendo previsiones de contratación. Hay proyectos a la vista», asegura Franco. Entre ellos, destaca sobremanera el caso de Tecnoaranda. Su responsable de Recursos Humanos, Jesús Sanza, admite que se sienten«muy afortunados de poder mantener el mismo nivel de actividad previsto antes del covid». De hecho, en enero realizaron 21 contrataciones que elevan su plantilla hasta los 314 empleados en Aranda, donde se instalaron en 2009. 

«El sector eólico vive un momento de expansión por dos motivos: el famoso 20-20, es decir, el compromiso de todos los países de la UE de crecer un 20% en energías limpias y reducir un 20% sus emisiones de CO2 antes de 2020, y el proyecto Horizonte 2030», explica al respecto. España, por ahora, no ha llegado a ese 20%, por lo que «hay movimiento», subraya Sanza, añadiendo que casi el 75% de su fabricación va para proyectos en Europa. «En principio, las expectativas para el sector son positivas. Con cautela, pero positivas», remata. 

De cara a las diez nuevas contrataciones que Tecnoaranda realizará hasta marzo, Sanza indica que buscan perfiles de oficio «puros y duros, de los de siempre». Es decir, oxicortistas, soldadores, electricistas, pintores, granalladores, montadores mecánicos, caldereros...

Entre los que apuestan por mantener empleo y actividad figuran Tubos Aranda, Aranda Coated Solutions, Todo Aceros, Imesa, Vemsa o Mecanizados Aranda.