El pasado jueves, la Policía Nacional puso en marcha un operativo a nivel nacional para prevenir la presencia de menores de edad en los locales de juego y también en las casas de apuestas. Esta medida viene motivada por la proliferación de estos establecimientos en los últimos años y las quejas de gran parte de la sociedad. En el caso de Burgos, se ha tramitado una denuncia a lo largo de los últimos cinco días tras las inspecciones realizadas por la Brigada Especial del Juego de la Comisaría Provincial.

Durante esta campaña, que según puntualizan fuentes de la Policía Nacional se realiza todos los años, se han inspeccionado decenas de locales, tanto en la capital como en Aranda de Duero y en Miranda de Ebro. Fue en un establecimiento de apuestas de Burgos donde los agentes localizaron a un menor de 17 años, por lo que tramitaron un acta de sanción que ha sido derivada a la Delegación de la Junta de Castilla y León, que se encargará de fijar la cantidad correspondiente en base a la normativa vigente.

Cabe recordar que son las comunidades autónomas las encargadas de regular las casas de apuestas presenciales y los salones de juego que se encuentran en su ámbito territorial. Las sanciones que acarrea el que alguno de los clientes de estos establecimientos no haya cumplido los 18 años de edad puede acarrear desde una multa económica hasta la pérdida de la licencia. Desde la Comisaría indican que el local en el que se encontró al menor no ha sido clausurado, si bien insisten que deberá ser ahora la administración competente la que debe decidir al respecto.

Está previsto que esta operación policial, denominada ‘Arcade’, se lleve a cabo hasta mañana jueves, cuando se darán a conocer los resultados de estas pequeñas inspecciones a nivel nacional. Estas campañas las llaman ‘action days’ y se trata de macrodispositivos para perseguir delitos concretos, en este caso la relación de los menores con estos locales. En la provincia se han dado por concluidas, por lo que el acta de denuncia tramitada en la capital es la única de esta campaña anual.

Tras la regulación a nivel regional de estos locales en el año 2015, la proliferación en la capital y la provincia ha sido espectacular. En Burgos se han dado de alta una treintena de casas de apuestas y salones de juego. Gamonal es uno de los barrios donde más han apostado las compañías por instalarse. Esto ha levantado las críticas de muchos vecinos, que han visto como muchos jóvenes frecuentan cada vez más los establecimientos con el objetivo de ganar dinero rápido. De hecho, la Asociación Burgalesa para la Rehabilitación del Juego (ABAJ) ya alertó hace un año de cómo ha bajado la edad media de personas que padecen adicción en el último lustro, ya que cada vez atienden más a jóvenes de entre 18 y 20 años de edad.