La futura grada del estadio municipal de Anduva permitirá que este se ensanche unos metros. La estructura ocupará algo más de la mitad del aparcamiento de El Príncipe. Ante esto, el AMPA ha emprendido una recogida de firmas con el objetivo de instar al Ayuntamiento a que explore soluciones. La asociación de padres no quiere adelantar acontecimientos, pero algunos afectados aseguran que «necesitan alternativas» porque «la campa de en frente es un lodazal». Estos hechos se suman a las incomodidades vividas cada día laborable que el Mirandés compite, cuando se cierra la zona.
«Por respeto a las familias y al Ayuntamiento, no queremos adelantar ningún capítulo», avisan desde la asociación de padres. Sin embargo, comentan que cuando se efectúe el proyecto «quedarán totalmente desprovistos de una solución alternativa». Asimismo, el AMPA tiene clara su línea de actuación. Primero, «hacer partícipes a las familias con la recogida de firmas» y, después, «pedir una cita con la Alcaldía para abordar el tema en profundidad».
Al margen de la asociación, progenitores denuncian que se les propone aparcar en el «patatal» situado frente al centro. Este terreno no posee asfalto y con cada tormenta se convierte en un auténtico «lodazal». Frente a esto los padres sentencian con suma rotundidad que «hace falta una alternativa, pero una alternativa para poder utilizarla durante todo el año, no solo en verano». La directora del centro, Lydia Marcelo, explica que «con echar asfalto sobre el terreno bastaría [...], solo se pide una opción real». «El patatal no se puede utilizar tal y como está», sentencia.
El hecho que desencadenó su malestar se remonta a noviembre. Durante los primeros compases de ese mes, el pleno aprobó ceder al Mirandés parte del terreno donde aparcan los padres . El club instalará allí su nueva grada de tribuna. El proyecto comenzará, si el conjunto rojillo no desciende de categoría, en el verano de 2023. Aunque la fecha todavía parece lejana, los afectados por la pérdida de las instalaciones públicas consideran necesario un movimiento de la entidad municipal «cuanto antes».
Las rencillas entre los usuarios que aparcan en la zona y el club de fútbol tienen varios capítulos ya. Desde que el Mirandés ascendió a segunda división, con cada jornada que se disputa entre semana los padres y profesores ven como cierran con vallas los aledaños del estadio. «Ellos son un evento nacional por lo que parece y nosotros no, aunque yo tenga en el colegio al futuro presidente o al futuro Messi», lamenta la directora del centro.
Según comentan algunos progenitores que han matriculado a sus hijos en El Príncipe, las clases terminan a las dos de la tarde y el lugar lo acordonan antes de esa hora cuando hay partido. «Hay gente que vive en el Crucero y va a a este colegio, porque Miranda es un distrito único», recuerdan los padres que necesitan desplazarse en sus vehículos. «No creo que la seguridad se pusiera en riesgo si respetan la salida y retrasan el cierre del parking media hora», completan.
En cualquier caso, tras varias reuniones en las que el concejal de Seguridad Ciudadana, Pablo Gómez, medió entre las partes, se alcanzó un acuerdo. «El colegio no va a cerrarse y el fútbol no va a acabar, por lo que debe llegarse a un punto intermedio de convivencia», explica el edil. Dicho y hecho, pues el Mirandés se comprometió a retrasar el cierre a las 14:30 horas y avisar del calendario de partidos con antelación.