A mover el cerebro

B.G.R.
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Un centenar de alumnos de 21 colegios participa en la primera Olimpiada Matemática de Primaria de Burgos. Hicieron dos ejercicios en los que se combinó la lógica y el juego

La prueba se realizó en el Museo de la Evolución Humana y consistió en dos ejercicios, uno individual y otro en grupos divididos por centros. - Foto: Jesús J. Matías

Las matemáticas no son una repetición memorística de ejercicios. Acabar con esta idea generalizada, hacer que los estudiantes pierdan el miedo a esta materia y mostrar su aplicación en las pequeñas cosas es el reto al que se enfrentan los profesores de esta asignatura y el objetivo del primer campeonato de esta disciplina que se organiza en Burgos dirigido a alumnos de Primaria. La respuesta no ha podido ser más satisfactoria para sus promotores, que han tenido que marcar límite de asistencia. Y es que, un centenar de escolares de 21 colegios de la capital y la provincia acudieron ayer al Museo de la Evolución Humana para participar en una cita que nace con carácter de continuidad y que llevará a los 6 ganadores a la fase regional.

 Los estudiantes, que cursan sexto de Primaria, se enfrentaron a dos pruebas. La primera era individual y constaba de cuatro ejercicios de lógica, mientras que para la segunda se organizaron equipos por centros que debían resolver retos matemáticos, como la observación de figuras geométricas, o pequeños problemas de cálculo. «No se trata de correr a ver quién llega más rápido, ni tampoco es un examen. Todos tenéis una matrícula de honor por estar aquí»,  les animó al inicio de la jornada Estíbaliz Rueda, asesora del Centro de Formación del Profesorado (CFIE) e impulsora de la iniciativa.

La idea surgió el año pasado, cuando esta docente acudió a Valencia a la fase nacional de la Olimpiada Matemática de Secundaria, que junto a la de Bachillerato son las más habituales. Allí, sin embargó, conoció que empezaba a despuntar la que tenía como destinatarios a los alumnos de Primaria y decidió importar la experiencia a Burgos. Con mucho trabajo consiguió que se sumaran otras tres provincias de la región (León, Segovia y Valladolid) para organizar una prueba regional, que se celebrará en mayo en esta última ciudad y de la que saldrán los escolares que participarán en la nacional que tendrá lugar en Melilla.

«Queremos que los niños disfruten de las matemáticas y vean que con ellas pueden hacer muchas cosas en el futuro», explicó Rueda, quien se mostró convencida de que habrá una segunda edición. No es algo de extrañar, puesto que los profesores que acompañaban a los alumnos se mostraron encantados con la actividad.

Azucena Virto, directora del colegio Francisco de Vitoria, consideró que este tipo de actos sirven para «descubrir el mundo real» de una disciplina que «está por todas partes». No obstante, reconoció que es hora enseñarla de otra manera. «Somos los profesores los que debemos darnos cuenta de que deben descubrirlas en las pequeñas cosas, que no hacen falta estudios memorísticos y que cuando encuentren la necesidad de usarlas las aprenderán mejor», señaló.

La Olimpiada Matemática cuenta con la colaboración de la Sociedad Castellano y Leonesa Miguel Guzmán, además de la Dirección Provincial de Educación. María Paz Zapiain, jefa deProgramas Educativos, alentó a los participantes a poner «a poner a funcionar su cerebro», ya que por mucho que las máquinas estén cada vez más presentes en la sociedad «hay cosas como la creatividad que no pueden desarrollar». Así lo hicieron a través de pruebas, juegos o retos en un ambiente distendido que tuvo como colofón un espectáculo a cargo del profesor de esta materia y también mago Antonio Arroyo.