Aranda de Duero quiere volver a optar a conseguir el nombramiento como Ciudad Europea del Vino, en este caso para 2020. Ya lo intentó hace tres años, en 2017, cuando le ganó la partida la localidad pontevedresa de Cambados. Para esta nueva oportunidad, la Concejalía de Desarrollo, Innovación y Turismo ha iniciado una campaña de recogida de apoyos, tanto de empresas e instituciones a través de cartas, como de la población en general.
Los ciudadanos de a pie pueden sumarse a esta candidatura plasmando su firma en un papel continuo de un kilómetro de longitud, que se encuentra en el stand del Ayuntamiento de Aranda en Fiduero 2019 a lo largo de todo el fin de semana. Los primeros en estampar su firma fue, ayer tras la inauguración de la XXXII Feria de la Ribera y por este orden, la alcaldesa, Raquel González, el consejero de Economía de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, y la concejala de Desarrollo, Innovación y Turismo, Olga Maderuelo, además del resto de autoridades presentes.
Ahora le toca el turno al resto de los visitantes a la feria, para que completen los 1.000 metros de papel con sus respectivas firmas, a modo de demostración de la confianza en que la capital ribereña también puede ser Ciudad Europea del Vino 2020. El 7 de octubre termina el plazo para la presentación de candidaturas a este título que otorga la Red Europea de Ciudades del Vino, que actualmente tiene la comarca de Sannio, en la provincia italiana de Campania, pero que el próximo año recaerá en una ciudad española.
De las candidaturas presentadas saldrá una nueva Ciudad Europea del Vino en la que, durante 12 meses, se desarrollarán numerosas actividades culturales, formativas y de sensibilización, encaminadas a dar a conocer el patrimonio, paisaje y gastronomía con el vino como hilo conductor. La organización evaluará las candidaturas entre el 25 de octubre y el 8 de noviembre antes de elegir.
Aranda es uno de los diez municipios firmaron el acta de constitución de la Asociación Española de Ciudades del Vino en 1994 y uno de los nueve fundadores de Recevin, la red europea de ciudades del vino. Hitos a los que suma su rico patrimonio enológico, con sus bodegas subterráneas, o que es el mayor municipio de la DO Ribera del Duero y el impulsor de la Ruta del Vino.