Estudian ciclos de grado superior y medio de la familia profesional de Fabricación Mecánica en el centro Salesianos Padre Aramburu. La formación práctica siempre llama su atención, pero en esta ocasión las ganas de entrar al taller se han acrecentado. Al aprendizaje técnico se ha sumado una motivación solidaria. Esta tiene que ver con la creación de incubadoras para neonatos con destino a países del tercer mundo, donde las elevadas tasas de mortalidad hacen que «mueran nueve de cada diez niños que nacen de forma prematura».

Lo explica Javier Tapia, jefe de taller, e impulsor local de este proyecto bautizado como Cunas Climáticas.  Todo comenzó en septiembre, cuando sus compañeros de Pamplona, promotores del proyecto, se vieron desbordados en lo que a peticiones se refiere. Una treintena de  hospitales de África y Latinoamérica mostraron su interés, después del buen funcionamiento de los equipamientos enviados. Ante la imposibilidad de atender la demanda, se pusieron en contacto con otros centros de la Orden como el de Burgos, que no dudó en sumarse a la idea.

(Más información, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)