Casi sin descanso. Así afronta el Blasgón y Bodegas Ceres Villa de Aranda su nuevo compromiso liguero. El conjunto ribereño se introduce de pleno en la vorágine de recuperación de partidos en Asobal y recibe esta tarde en el pabellón Príncipe de Asturias a BM Benidorm (18.00h.), en un encuentro difícil -la plantilla alicantina está confeccionada para Europa esta temporada-, pero en el que nuevamente los pupilos de Alberto Suárez intentarán dar el máximo de sí mismos para soñar con lograr una nueva victoria en liga.
En ese sentido precisamente, rival complejo para el conjunto ribereño. No tanto por el estilo al que tendrán que hacer frente los jugadores arandinos sobre la pista, puesto que, como ha asegurado el propio Suárez, éste se encuentra a medio camino entre la faceta lanzadora de Puente Genil y el juego en continuidad de Valladolid, sino por la calidad que atesora el vestuario alicantino.
Y es que, confeccionada en su momento para competir en Europa -luego terminó descolgándose de la EHF por la situación del coronavirus en el país-, la plantilla de Fernando Latorre puede presumir de tener entre sus filas a jugadores, entre otros, de la talla del extremo Mario López. Una pieza, quizá, de las «más resolutivas de la liga», como ha indicado el técnico asturiano, y un recurso vital al que acompaña la fortaleza de una portería muy completa (con la dupla Vial-Rodríguez), y un pivote de calidad contrastada como es Gonzalo Porras.
Sin embargo, y para luz del conjunto amarillo, existe un debe en el armario de virtudes levantinas. Y ese no es otro que su falta de lateral derecho. Una situación limitante tras la salida del equipo del cubano Pabán (abandonaba la entidad junto al pivote portugués Leitao el 1 de noviembre), y agravada ahora con la reciente baja por lesión del único zurdo que quedaba en liza, el holguinés Ángel Jesús Rivero, (por fractura en una mano).
En definitiva, ‘ventajas’ que tratará de aprovechar el equipo arandino junto a la recuperación del meta Castro y del extremo Baronetto para la cita (ambos eran baja el miércoles por cuestiones federativas), pero que tendrán como contraparte negativa -no podría ser de otro modo este año-, las dudas por molestias hasta última hora tanto de Álex Pombo como de Guilherme Leonel.