Las instalaciones del recién creado Centro de Arte Joven en lo que es el edificio del Molino, junto a las nuevas oficinas de la Concejalía de Juventud, se están ultimando estos días para poder hacer uso de ellas, con la instalación del sistema de calefacción, único fleco que quedaba tras la reforma del inmueble, que tiene que estar terminada antes del 31 de diciembre.

Ahora resta dotar de contenido a este edificio, para lo que se plantean dos vías diferentes. "Cuando se apruebe del presupuesto de 2022, que es donde se ha metido el dinero, se contratará a una empresa para que haga actividades de ocio alternativo los viernes y sábados", puntualiza el concejal de Juventud del Ayuntamiento de Aranda, Emilio Berzosa, a lo que habría que unir las actividades que se puedan desarrollar desde la propia Concejalía. "Me tengo que reunir aún con los técnicos para ver que es lo que se puede plantear para empezar a funcionar en febrero", especifica Berzosa en cuanto a la posible programación.

De momento, la inauguración de las instalaciones, a falta de una fecha concreta, contará con una muestra expositiva con los trabajos de los alumnos de la Escuela de Cerámica de los últimos años. En cuanto a la dotación del centro, solo resta adquirir por parte del Ayuntamiento un equipo de luz y sonido para poder llevar a cabo conciertos a pequeña escala en el escenario con el que cuenta este nuevo espacio de ocio.