Los últimos temporales del invierno han afectado especialmente al GR-14 de Aranda. Si la ruta pegada a la ribera del río Duero a su paso por la capital ribereña ya estaba descuidada, las crecidas de los pasados meses han añadido más desperfectos. Se trata concretamente de tres nuevos derrumbes que por sus dimensiones amenazan incluso con hacer desaparecer la senda. "Si no hay ninguna intervención, igual en dos meses no hay sendero", lamenta el tesorero del club espeleológico Espeleoduero, José Luis Esteban. Ellos, junto a algún vecino en redes sociales, fueron los primeros en alertar de la grave situación del recorrido. A partir de sus avisos, los Bomberos de Aranda han precintado las zonas más peligrosas, aunque algunos de los agarres de las cintas, troncos y palos en su mayoría, ya evidencian una futura caída.
El derrumbe más fuerte de los tres nuevos del tramo arandino del GR-14 se encuentra pasado el kilómetro 2 de la ruta, más o menos a la altura de los cines Victoria, y las dimensiones del mismo han sido tales que apenas han dejado transitable un metro de sendero. Un viandante, mientras paseaba por allí, explicaba que la causa era la rotura de una de las tuberías que bajan al río. Al partirse, la caída incontrolada de agua se ha llevado gran parte de la ribera. Otro de los desprendimientos se debe a la misma causa y también está precintado por los bomberos. El tercero de los derribos obedece a otra causa, también común en los males del paraje: los árboles dañados que nadie retira y acaba arrastrando el río y con ellos sus raíces y las orillas. En este caso, no hay cinta de seguridad ya que el desplome ha sido menor, aunque las largas y profundas grietas, que se repiten a lo largo de todo el GR-14, amenazan con agrandarlo.
Ante las quejas vecinales y las evidencias de las imágenes, el Ayuntamiento de Aranda ha anunciado medidas. Los concejales del equipo de Gobierno recorrerán este domingo el sendero del Duero para comprobar el estado del mismo. A dicho paseo no están invitados solo los ediles del cogobierno PP y Ciudadanos, sino que, para dar rienda suelta a interpretaciones, también lo están los dos representantes de Vox. El concejal de Medio Ambiente, Carlos Fernández, detalla que en dicha ruta también estará la técnico de Aguas y Medio Ambiente para realizar un expediente sobre los desperfectos y las necesidades del entorno. Ese informe será remitido a la Junta para que, como defiende el edil del área, la administración autonómica costee el 80-90% de las inversiones necesarias.
Ese juego de ‘tuya-mía’ entre Junta y Ayuntamiento es una de las prácticas que llevan denunciando tiempo los más comprometidos con el GR-14. En Espeleoduero insisten en la necesidad de actuar con "urgencia" y en el riesgo real que hay para el paso, sobre todo, de ciclistas. Ellos afirman que han comunicado los últimos derrumbes tanto a la Junta como al Ayuntamiento pero que "se pasan la pelota entre ellos" y no han tenido respuesta.
Por su parte, el grupo político que más ha hablado últimamente de la senda, Podemos, critica el "escaso mantenimiento" y su concejal, Andrés Gonzalo, ha trasladado el mal estado del paraje a los procuradores de su partido. Representantes que registraron hace meses una propuesta para crear una ruta del Duero de Soria a Portugal potenciada y financiada por la Junta en su totalidad, también en los términos municipales.