El coronavirus mantiene en alerta a las instituciones públicas, que volverán este año a crear líneas de ayuda para los sectores más castigados económicamente por la pandemia. El Ayuntamiento de Miranda prepara la segunda campaña de bonos al consumo y lo hace con una novedad, porque la hostelería quedará fuera y el comercio acaparará los 50.000 euros que convertirán en vales para alentar el gasto en la ciudad. Además también se avanza para establecer una nueva subvención directa a pequeños negocios, que por el momento contarán con 112.000 euros.

El concejal de Promoción Económica, Miguel Ángel Adrián, indica que la modificación respecto a la primera campaña de bonos al consumo viene impuesta por la Junta de Castilla y León. La administración regional aportará 31.000 euros en esta ocasión  y «nos exigía complementarlo con un 20% de las arcas municipales, pero hemos decidido no limitarnos a ese porcentaje sino completarlo hasta los 50.000 euros», remarca Adrián.

De momento, los bonos que se sacaron a la venta a final del año pasado todavía pueden gastarse durante mayo y en junio los comercios y hosteleros podrá cerrar la justificación. Por este motivo, Adrián repara en que queda tiempo para negociar con los comerciantes aspectos como las fechas en las que podrán en marcha esta segunda venta de bonos, «aunque imagino que por su parte querrán evitar fechas como la Navidad», por lo que la primera posibilidad es que entren en vigor después del verano.

Para sacar adelante la campaña, el Ayuntamiento  redactará un primer borrador de las bases que presentará la próxima semana en la mesa del diálogo social, «para que puedan hacer todas las propuestas de modificaciones». Respecto a la tramitación, en esta ocasión resultará más sencilla, ya que el responsable municipal recuerda que paralelamente el Ayuntamiento ya tienen elaborada la modificación de la ordenanza de subvenciones, por lo que los comercios no tendrán que completar los 50.000 euros con ninguna aportación económica y además recibirán el 100% de la subvención a la vez.

Este cambio de la norma municipal tendrá que ratificarse en el próximo Pleno, en el que el equipo de gobierno también presentará un modificado de crédito, que permitirá habilitar un presupuesto para establecer las ayudas directas. El concejal de Promoción Económica reconoce que todavía negocia con empresarios y sindicatos, aunque la intención que ya han transmitido en la mesa de diálogo social es que los 112.000 euros se repartan fundamentalmente en sectores como el ocio nocturno, los gimnasios y las agencias de viajes.

«Todos ellos han estado cerrados durante este año, incluido la agencias de una manera indirecta porque los vecinos no podían salir de la comunidad», recuerda Adrián, que deja fuera en este caso a los comercios que sí que han estado abiertos, aunque una de las propuestas de los empresarios es que puedan incluirse «negocios que hayan perdido el 50% de la facturación», aunque este aspecto está por detallar.

Los 112.000 euros todavía podrían ampliarse de otras partidas, pero de momento el equipo de gobierno ha sacado 100.000  del presupuesto de fiestas y otros 12.000 euros que inicialmente estaban ideados para una escuela taller que la Junta no ha concedido.