El Año Jubilar podría disparar un 50% las pernoctaciones

G. Arce
-

Se solapará con el Año Santo Jacobeo, lo que confiere más singularidad a una celebración religiosa, cultural y turística que convertirá la ciudad en centro de peregrinación mundial

El Año Jubilar podría disparar un 50% las pernoctaciones - Foto: Luis López Araico

El arzobispo, Fidel Herráez, recibió a mediados del pasado mes de mayo la confirmación que llevaba esperando desde hace un tiempo. Fue una llamada telefónica desde el Vaticano: El Papa Francisco había dicho ‘sí’ y daba su autorización para que Burgos viva entre el 20 de julio de 2020 y el 7 de noviembre de 2021 uno de los acontecimientos más singulares de su historia: su primer Año Jubilar, que tendrá como referente a la Catedral, inmersa entonces en la celebración del octavo centenario de su construcción. Burgos se convertirá -trabajando unida para ello- en centro de peregrinaje a nivel mundial por espacio de 16 meses, con las implicaciones religiosas, económicas, culturales y sociales que ello conllevará. Además de ser la primer vez, en este caso se da otra circunstancia excepcional, pues coincide en el tiempo con el Año Santo Jacobeo, cuya influencia trascenderá a miles y miles de peregrinos venidos desde todo el mundo, lo que reforzará la afluencia de visitantes.

Burgos será más que nunca destino de peregrinación y su icono monumental, Patrimonio de la Humanidad internacionalmente reconocido e imagen universal de la ciudad, adquirirá toda su dimensión como templo de la cristiandad abriendo sus puertas a los acudan en penitencia a solicitar la indulgencia plenaria, devotos o simples turistas.

La máxima ilusión ahora -que nadie oculta- es que este histórico cruce de caminos sea motivo suficiente para la primera visita de un Papa a la ciudad, acontecimiento en el que ya se está trabajando a nivel nacional y que dependerá en última instancia del Vaticano y del propio Papa Francisco, que tendrá 84 años entonces. Ya se intentó con el Año Jubilar Teresiano, celebrado en 2015 con motivo del V centenario del nacimiento de Santa Teresa en Ávila, y finalmente no fue posible.

A buen seguro, el arzobispo trasladó esa invitación durante el encuentro que mantuvo el pasado martes en Roma con el cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Pontificio Consejo para la Cultura, cita en la que se presentaron los actos del Año Jubilar. El cardenal expresó su deseo de venir a Burgos y animó a la Diócesis a solicitar un legado pontificio, un representante del Papa para los actos programados, lo que es un primer paso...
reconocimiento. Pero, ¿qué es un año jubilar? Es un «acto religioso» de raíces judías cuyos orígenes se remontan al año 1300. «Es un año de gracia, un año especial en el que, teóricamente, se olvidan los males y se vuelve a empezar de nuevo. Es también un reconocimiento a una Iglesia, la burgalesa, que ha mantenido viva la Catedral durante 800 años», resume el decano de la Facultad de Teología, José Luis Cabria.

Históricamente, los años jubilares los convocan los papas cada 25 o 50 años. Son universales y algunos excepcionales, como el último, el de la Misericordia, celebrado entre 2015 y 2016. Nunca corresponden con los años naturales del calendario, sino que se abren y cierran en fechas significativas: en el caso de Burgos, la colocación de la primera piedra de la Catedral, el 20 de julio de 1221; y el Día de la Iglesia Diocesana, que en 2021 se celebrará el 7 de noviembre.

Todo año jubilar tiene una sede -un santuario, una catedral, una iglesia con una reliquia o una imagen- donde acudir para recibir la plenitud de la penitencia. «La Iglesia es mediadora y administradora de este sacramento y pone unas condiciones para recibirlo (por lo general, misa, comunión y confesión en un plazo determinado de días)».
Hay dos tipos de años jubilares, los in perpetuum y los que se celebran solo una vez, como será el caso de Burgos. Jerusalén, el lugar de nacimiento de Cristo, y Roma, la residencia del Papa, disfrutan de un jubileo perpetuo.Hay otros lugares ubicados en España, a los que también se convoca regularmente para recibir la gracia del perdón.

El Papa Calixto II otorgó en el año 1126 el jubileo a Santiago de Compostela, que se celebra los años en los que el 25 de julio, día de Santiago, cae en domingo, lo que ocurrirá en 2021. El Año Santo Lebaniego fue concedido por el Papa Julio IIen 1512 y se celebra en el Monasterio de Santo Toribio de Liébana (en Camaleño, Cantabria) cuando el 16 de abril, día de Santo Toribio, sea domingo.

También están los jubileos del Santísimo Cristo de Urda, en Toledo, el 29 de septiembre;el de la Vera Cruz de Caravaca de la Cruz, en Murcia, cada 7 años; el Año Jubilar Teresiano, en Ávila, el 15 de octubre; y el Año Jubilar en Honor al Santo Cáliz de Valencia, que se celebra cada 5 años. Recientemente se ha concedido el Jubileo de la Santa Faz, en Alicante. Los dos primeros fueron aprobados por Juan Pablo II y los tres últimos por el pontífice actual. Ambos papas han dado especial empuje a este tipo de celebraciones, que suponen un revulsivo espiritual y también económico y turístico en los lugares donde toca.

Aparte de estas grandes citas, cada año se celebra un rosario de jubileos locales por diferentes motivos religiosos. 2018 fue especialmente prolífico en estas citas: el 50 aniversario de la consagración de la catedral de la Almudena, el Oratorio delCaballero de Garcia, el centenario de la parroquia del Cristo de la Salud (en Madrid);el 75 aniversario de la imagen del Cristo de la Salud (en El Palmar, Valencia); los 75 años de la exposición permanente del Santísimo en la iglesia del Monasterio de Santo Domingo, en las Clarisas de Soria; el 275 aniversario de la Hermandad Sacramental de San Juan Bautista, en Sevilla;o el 300 aniversario de la consagración del altar y la capilla de San Fermín, en Pamplona.

Ahora estamos inmersos, entre otros, en el Año Jubilar por el 300 aniversario de la muerte de San Juan Bautista de La Salle o el primer centenario de la Devoción a Nuestra Señora delPerpetuo Socorro de Almoradí (en Alicante). Este fin de semana ha comenzado el Rocío, que es una romería jubilar... Cada año se conceden más de 50 jubileos por todo el mundo.

(La información completa, en la edición impresa)