César Rico, presidente de la Diputación de Burgos, ha presentado la Vuelta a Burgos 2020. Será una carrera especial, marcada por las medidas sanitarias y que se convertirá en un referente mundial, al ser la primera prueba internacional que se celebra tras la crisis causada por el coronavirus. Serán cinco etapas, entre el 28 de julio y el 1 de agosto y contará con 22 equipos, 14 de ellos de la máxima categoría mundial. En cuanto a la participación, será histórica, con corredores de la talla de Mikel Landa, Alejandro Valverde, Enric Mas, Marc Soler, Richard Carapaz, Fabio Aru, Fernando Gaviria, Mads Pedersen (campeón del Mundo), Remco Evenepoel, Rafa Majka, Matteo Trentin y otros muchos situados en la élite mundial.

La primera etapa tendrá la Catedral como salida y llegada en el Castillo. La segunda discurrirá por las 4 Villas de Amaya, con salida en Castrojeriz y llegada en Villadiego. La tercera comenzará en Sargentes de la Lora y culminará en la cima de Picón Blanco. La cuarta transcurrirá por la Ribera (Bodegas Nabal-Roa), mientras que la quinta se iniciará en Covarrubias y acabará en Las Lagunas de Neila, cima que distará el vencedor final.

Pero sin duda alguna las características de esta edición estarán centradas en las exigentes medidas sanitarias que rodearán la prueba, con acceso limitado a las salidas y llegadas, evitando en lo posible cualquier contacto con los corredores.  En este sentido, César Rico apeló a la responsabilidad individual de los aficionados y pidió el uso de mascarillas para todos los seguidores que quieran presenciar el paso del pelotón.

La carrera será retransmitida por Televisión Española y también por Televisión Castilla y León, y tendrá un seguimiento mundial por su carácter pionero al ser la primera carrera del calendario internacional y por la talla de los ciclistas que vendrán a disputarla.

El presupuesto de la Vuelta a Burgos 2020 será similar al de la edición de 2019, es decir, 700.000 euros.