La Arandina ha encontrado finalmente su propuesta de juego esta temporada. Esa es la virtud que defiende el nuevo planteamiento del técnico blanquiazul en el banquillo, Alex Izquierdo, pero también los resultados obtenidos por su equipo en las últimas semanas de competición. Unas cifras notables en cuanto a prestaciones (diez puntos de doce posibles en cuatro partidos), y una escalada de puestos en la clasificación derivada de ello que ha servido a la entidad de El Montecillo para recortar, de paso y después del empate a cero del domingo, hasta los cinco puntos su desventaja respecto a la zona de playoff.

Y es que, tras haber iniciado con relativo éxito la etapa más complicada del calendario -los futbolistas blanquiazules han sumado cuatro de los seis últimos puntos en liza-, Izquierdo ha asegurado sentirse «muy satisfecho» con el trabajo realizado por sus jugadores sobre el césped.

Más si cabe tras el reciente duelo vivido en el Adolfo Suárez y después de la expulsión sufrida allí por parte de Pesca. Un escenario en el que los ribereños padecieron en inferioridad el asedio rival durante casi un cuarto de hora, pero también un reto superado frente a la adversidad y del que el equipo supo salir reforzado para acumular, por tercera semana consecutiva, un nuevo cero en contra en el marcador.

Precisamente dicha mejoría defensiva era uno de los puntos analizados de forma positiva tras el encuentro por parte del técnico blanquiazul. Números que reconocen el trabajo realizado por el equipo durante las sesiones de entrenamiento semanales y que ha permitido que «sólo hayamos encajado un gol en cuatro partidos» gracias a que el equipo «está cada vez más sólido abajo». Buen punto de partida sobre el que crecer y, sobre todo, con el que seguir acercándose a la zona playoff.