La asociación de madres y padres de la escuela infantil Santa María la Mayor, dependiente de la Junta, y la Dirección Provincial de Educación han alcanzado un acuerdo para solucionar la reubicación de alumnos debido a las filtraciones de agua que se han producido en el centro por las obras que se están ejecutando en la cubierta. Fue el pasado viernes cuando se tomó la decisión de trasladar dos de las cinco aulas afectadas al colegio público Alejandro Rodríguez de Valcárcel. Se trata de una medida provisión que, en principio, se extenderá hasta el puente de diciembre.

Las familias consideran esta respuesta más adecuada a la que los responsables educativos ofrecieron en un primer momento. Esta pasaba por redistribuir a los 80 escolares de las citas clases en un amplio salón de 200 metros con zonas específicas para cada grupo con el fin de cumplir con los protocolos anticovid. «Nos convence mucho más que el hecho de que estén todos los niños en el mismo espacio», señala Rebeca Marín, miembro del Ampa, quien alaba el trabajo realizado por la presidenta de la entidad, Miriam Díez, así como la «buena predisposición» de la Dirección Provincial de Educación.

El traslado afecta a 18 alumnos de 2 y 3 años, para lo que el colegio público ha tenido que readaptar sus instalaciones para poder mantener los horarios y el servicio de la escuela. Las otras tres clases, con más de 40 escolares, se han distribuido entre el citado salón y el comedor. La medida entrará en vigor este jueves (...).

(Más información, en la edición impresa de Diario de Burgos de este miércoles o aquí)