«Estoy muy contento de haber podido trabajar esta temporada. Ha sido gracias a los contratos que tenía en España porque es el único sitio donde se ha podido cantar. Se ha hecho además con un gran resultado de público y sin ningún caso de covid». Desde el pasado septiembre Rubén Amoretti ha participado en tres producciones operísticas, la mitad de un año sin pandemia, y ha podido realizar algún que otro concierto. Es, sin duda, el año que más trabajo ha tenido en España, dado que los proyectos internacionales se han pospuesto o cancelado.
El último proyecto es El rey que rabió, que se estrenó el jueves en Madrid y con el que el Teatro de la Zarzuela cierra la temporada. El bajo burgalés cantará en diez de las catorce funciones de esta gran obra del repertorio lírico español con música de Ruperto Chapí que estará en cartel hasta el día 20.
En esta zarzuela Amoretti interpreta al General, un «rol muy simpático y gracioso» que requiere de grandes dotes actorales porque tiene casi más texto hablado que cantado. «Es un montaje atemporal, una fábula que discurre en un país imaginario, una farsa cómica y entretenida que va a sorprender al espectador. La puesta en escena es estupenda y estoy seguro de que va a ser un éxito», resume el cantante burgalés, mencionando que la dirección escénica corre a cargo de Bárbara Lluch. «He decidido ambientarla en algún lugar de ninguna parte. Ayer, hoy o pasado mañana. La historia se repite como todos sabemos, y pocas cosas no hemos visto ya», advierte en el programa.
La historia es la de un monarca que está cansado de vivir en palacio y quiere conocer lo que ocurre en el exterior para lo que decide vestirse de campesino para viajar de incógnito. El General, el papel que interpreta Amoretti, será su acompañante, una especie de fiel escudero y testigo de los acontecimientos.
En octubre, en la Catedral. Al margen de la zarzuela, Rubén Amoretti prepara un recital para después del verano en el templo gótico con motivo del VIIICentenario. Lo hará junto a la cantante Esther Roma con un repertorio «sacro diferente al habitual».