Tras cerrar 2020 con una caída de las ventas del 60%, la Asociación de Floristas y Jardineros de Burgos (Flojabur) ve difícil la recuperación pero sí que vislumbra algo de luz al final del túnel con la esperanza de la vacunación. Por ello y después de no poder celebrar por segundo año consecutivo sus tradicionales ferias, ha propuesto al Ayuntamiento la organización de un gran evento en el patio del monasterio de San Juan de cara a la Navidad.
«No se dan las circunstancias para que vuelva a realizarse en mayo la Fiesta de la Flores», explica el vicepresidente de la entidad, David Ruiz, en referencia al mercado que tiene su epicentro en la plaza Huerto del Rey y que se completa con la decoración de los principales monumentos de la ciudad gracias a la participación de escuelas florales de toda España. A pesar de la imposibilidad de esta cita, confía en que puedan participar en julio en los actos centrales del VIII Centenario de la Catedral con el desarrollo de alguna intervención.
Será un punto de partida para dar visibilidad al sector que continuará en septiembre con la celebración del concurso al Mejor Artesano Florista, organizado por Interflora y que ya tuvo que aplazarse el pasado ejercicio, contando también como sede con el cenobio burgalés y al que se unirán los festejos por el aniversario de la citada empresa. Con todo ello Flojabur ya piensa en los siguientes meses y en la posibilidad de recuperar las ferias perdidas por la crisis sanitaria, ya que a la de mayo se suma el mercado que realizan a finales de noviembre en el Palacio de Castilfalé para abrir la campaña de Navidad.
Pensando en esta idea y en que la situación será «lo más parecida a la normalidad que conocíamos», la asociación gremial quiere que la muestra de este año sea de mayor envergadura que las anteriores, por lo que lo primero en lo que han pensado es en el cambio de escenario. Cree que el más idóneo es al patio del monasterio de San Juan, además de la intención de que las fechas coincidan con la celebración del Salón del Libro Infantil que tiene lugar en el claustro cubierto del cenobio burgalés.
Ruiz explica que la simultaneidad de ambos eventos permitirá crear sinergías y la confección de un programa de actividades paralelo que dinamice la feria floral. La intención de la entidad pasa por incrementar la participación de negocios en la muestra, en la que habrá exposición y venta, además de que se engalanará el monasterio para la ocasión. En este punto, añade que la propuesta ya se ha presentado al Ayuntamiento, que la ha recibido «con buenos ojos» y se ha comprometido a estudiarla.
En lo que se refiere a la situación del sector, el representante de la agrupación precisa que las ventas siguen contenidas, con un cierto repunte de las que tienen como fin la decoración del hogar, pero que en ningún caso permite hablar de recuperación. Mientras tanto los eventos, que ocupan buena parte de su actividad, se mantienen en algunos casos, aunque en formato muy reducido, y en otros se han cancelado. Los que no están sufriendo variaciones son los previstos a partir de agosto, para cuando se nota un mayor movimiento.