La calma regresa a Modúbar de la Emparedada

I.P.
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Tras dos años de conflictos por sendas denuncias del alcalde y la administrativa contra la secretaria, el cese voluntario de ésta es aplaudido por el regidor «por la buena marcha y los avances en los proyectos del Ayuntamiento»

Rafael Temiño asegura que ahora está muy contento con el nuevo secretario porque el Ayuntamiento «funciona». - Foto: Patricia

El Ayuntamiento de Modúbar de la Emparedada recobra la tranquilidad después de dos años en los que ha estado envuelto en procesos judiciales que han tenido como protagonistas al alcalde, a la secretaria y a la administrativa y que finalmente se ha saldado con la salida voluntaria del Ayuntamiento de ambas, la llegada de un nuevo secretario tras haber pasado varios funcionarios durante el periodo de un año en el que la titular estuvo de baja, y con ello la recuperación de la normalidad administrativa, asegura el alcalde Rafael Temiño. 

El regidor recuerda, a su vez, que durante dos meses y medio delegó sus funciones en el teniente de alcalde por motivos de salud, provocados, explica, por la tensión vivida con la entonces secretaria, contra la que puso una denuncia en septiembre de 2019 por un presunto delito de falta de respecto a la autoridad, tras un ‘encontronazo’ en dependencias municipales en el que, según la sentencia, se profirieron «a voz en grito» por ambas partes expresiones ofensivas, cuando ella le pidió explicaciones por los errores en un expediente que el regidor había manifestado. 

Esta denuncia, en todo caso, acabó con la sentencia absolutoria de la secretaria y la posterior desestimación en marzo del recurso de apelación interpuesto por la defensa del regidor.

En este sentido, el alcalde explica que da por zanjado el proceso judicial por presunto delito leve contra la ya exsecretaria del Ayuntamiento, máxime cuando ella misma solicitó el cese voluntario que firmó «encantado» Temiño, que explica que a lo que no renuncia es a seguir con otro procedimiento abierto contra ella, como es el expediente disciplinario que, en este caso tiene que resolver la Junta de Castilla y León. Para Rafael Temiño, lo más importante es que la secretaria ya no tiene relación laboral con el Ayuntamiento de Modúbar, ya que ahora desempeña sus funciones en otra localidad. 

Este no fue el único proceso en el que estuvo involucrada la secretaria de Modúbar, y que alteró el funcionamiento y la situación administrativa municipal, porque además ésta funcionaria ha permanecido de baja durante un largo de periodo de tiempo. En este caso, fue la administrativa quien la denunció acusándola por trato degradante y acoso laboral. Tampoco en esta denuncia hubo condena alguna para la secretaria, sino que el tribunal acordó el sobreseimiento de la misma «al no quedar acreditada la comisión de ningún delito claro e inequívoco de contenido vejatorio dirigido a humillar, denigrar y en definitiva atentar contra la integridad moral de la denunciante». Ésta presentó recurso de apelación que, al igual que en el caso de la denuncia del alcalde contra la secretaria, también se desestimó. A fecha de hoy, tampoco la administrativa trabaja en el Ayuntamiento de Modúbar, y actualmente está de secretaria interina en otro Consistorio, explica el alcalde que añade que ésta cumplía con su trabajo, «no como la secretaria».

Temiño afirma que quiere olvidar todo lo pasado, que está satisfecho de que ya la funcionaria a quien denunció no trabaje en Modúbar y que lo que quiere es trabajar por el pueblo. Añade, por otra parte, que está «contentísimo» con el secretario actual que lleva ya desde el cese de su antecesora. En este sentido, el alcalde explica que las aguas han vuelto a su cauce y que se están sacando adelante proyectos como el expediente de un parque eólico, la depuradora de Cojóbar o la tramitación de subvencione que antes no se realizaban.

En todo caso, asegura que de no haber pedido la baja voluntaria la funcionaria, él hubiera dejado el Ayuntamiento «porque me estaba costando salud y lágrimas», y añade que desde «el minuto uno que entré de alcalde, ella acarreó el 90% de los problemas que han pasado en el Ayuntamiento», y dice que se ha hecho más en el año que estuvo de baja y los cuatro desde que se ha ido, que en seis años, «porque ella no hacia más que poner palos en las ruedas», argumenta. Temiño reconoce que ahora «podría seguir siendo alcalde hasta 20 años» por la tranquilidad que se respira.