El presidente del Colegio de Médicos, Joaquín Fernández-Valderrama, fue ayer tajante al referirse a la negativa de Sacyl a prorrogar la vida activa del oncólogo del HUBU Carlos García Girón una vez superada la edad de jubilación, como él solicitó el pasado julio. «Es una indecencia y un ataque a la dignidad y a una trayectoria profesional brillante», afirmó el portavoz de los facultativos de Burgos, destacando que el rechazo a la petición de García Girón obedece a un «propósito persecutorio. Es así desde que se le relevó de la jefatura de servicio», a finales del pasado mayo.

La Gerencia Regional de Salud (Sacyl) tomó la decisión de «no prolongar la permanencia en servicio activo» del reputado oncólogo en base a un informe de la Gerencia de Atención Especializada de Burgos, que es la gerencia del HUBU. El especialista ya ha anunciado que va a recurrir, primero por la vía administrativa y, si es necesario, también por la vía judicial. Pero, si no hay cambios, el 28 de octubre se produciría su jubilación forzosa.

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