Pastor se despide en Salamanca como presidenta del Congreso

Ical
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La aún presidenta del Congreso se siente "orgullosa y honrada" por el trabajo realizado en "tres años más complicados que nunca"

La presidenta del Congreso, Ana Pastor (c), visita la carpa electoral del PP en la plaza del Liceo junto al presidente del Partido Popular de Salamanca, Javier Iglesias, y el candidato a la Alcaldía, Carlos García Carbayo - Foto: David Arranz (Ical)

La presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, deseó hoy “que le vaya bien por el bien de España” a su sustituta al frente de la Cámara Baja, previsiblemente la socialista Meritxell Batet, tan solo unas horas después de su despedida como máxima autoridad del Congreso, cargo que dejará oficialmente el martes cuando se constituyan las nuevas Cortes Generales.

En su visita a Salamanca de esta tarde, Pastor hizo balance de sus tres años al frente del Congreso de los Diputados señalando que se siente “orgullosa y honrada” de su trabajo al frente de la Cámara Baja, donde previsiblemente seguirá como vicepresidenta tras ser propuesta por su formación, el Partido Popular.

“Estoy muy agradecida a mi partido porque haya confiado en mí y me siga dando responsabilidades”, señaló Pastor, quien no obstante se sinceró afirmando que “una parte de peso se quita de encima” con el relevo en la Presidencia porque “han sido tres años más complicados que nunca, con dos mociones de censura y dos investiduras”.

“Ahora es una etapa nueva”, continuó la aún presidenta del Congreso de los Diputados, quien aseguró que seguirá “trabajando con la misma ilusión y ganas” y consideró ser diputado “el mayor honor que tiene un ciudadano” porque significa “representar a sus paisanos”.

Entrega de actas a políticos presos

En cuanto a la entrega de actas realizada hoy a los políticos catalanes presos, elegidos como diputados en las pasadas elecciones del 28 de abril, Pastor no quiso entrar a valorarlo y se limitó a señalar que hoy hizo que “todo esté dispuesto para cumplir con el mandato que nos daba el Tribunal Supremo”.

“Mi obligación como presidenta es tener todo listo y atender al requerimiento que nos hace el Supremo a las Cortes Generales”, concluyó, afirmando que no haría “ningún comentario” más al respecto.