El polígono industrial Alto de Milagros podría sumar próximamente otra empresa más. En estos momentos hay cerca de 24.000 metros cuadrados en proceso de venta para la llegada de una nueva compañía, como adelanta la CEO de Inmoba Aranda, Mamen Matesanz, al frente de las negociaciones.
Aunque no desvela al ámbito al que pertenece la firma interesada en instalarse en la Ribera del Duero, Matesanz sí avanza que «es un sector muy en boga» y que creará «bastantes puestos de trabajo». Si todo marcha según lo previsto, la especialista en suelo industrial, que lleva tres años moviendo tanto el polígono Prado Marina en Aranda de Duero como el de Milagros como agente de Servihabitat, confía en que la operación se haga efectiva en los tres próximos meses.
«El beneficio es para todo el pueblo. Unas empresas atraen la llegada de otras», subraya Matesanz, quien pone en valor los contactos que mantiene con empresas de toda España por su pertenencia a la Red Nacional de Agentes Inmobiliarios. De su mano ya se han instalado en Milagros siete compañías. Y siempre, según Matesanz, trabajando «codo con codo» con el Ayuntamiento de la localidad.
Otras fuentes con conocimiento de estas negociaciones también confían en que lleguen a buen puerto, si bien se mantienen la cautela por la existencia de una gran cantidad de suelo industrial en diversas localidades.
Al margen de esta operación, Matesanz indica que Servihabitat cuenta en estos momentos con cerca de 33.000 metros cuadrados en venta, libres, en el polígono de Milagros. En cuanto al tipo de parcelas disponibles, figuran 13 de 700 metros, tres de 2.600 y otras tres de 5.200, con precios a partir de ocho euros el metro cuadrado. «Estamos a 11 kilómetros de Aranda, en una buena ubicación, con acceso directo a la autovía», resalta, mientras considera que no hay mayor incentivo que el bajo coste del suelo industrial para que cualquier empresa se instale en Milagros.
Bonificaciones renovadas. Hace poco más de dos meses, el Ayuntamiento de Milagros aprobó la renovación de una bonificación del 35% de la cuota íntegra del impuesto de bienes inmuebles de naturaleza urbana de la zona del polígono industrial, sectores SUI-I y SUI-2, en los que se desarrollan actividades económicas y que sean declaradas de especial interés o utilidad municipal por concurrir circunstancias sociales, culturales o de fomento de empleo. Así lo recogió el Boletín Oficial de la Provincia de Burgos (Bopbur), indicando que la vigencia de esta bonificación será de dos años a partir de 2022.
«Lo más importante es que se ubiquen empresas aquí. Consideramos que lo lógico es apoyar buenos proyectos que generen empleo», subraya el alcalde, Pedro Luis Miguel, destacando que este tipo de bonificaciones generan resultados positivos en el futuro ya que, sin ir más lejos, esas compañías pagan sus impuestos en el municipio y generan riqueza en buena parte de la comarca.
De hecho, el regidor admite que «no les importaría» realizar una rebaja aún mayor con el fin de reactivar el polígono industrial. «Estamos dispuestos a poder dar cualquier ayuda», remata.
Todo ello en un pueblo con alrededor de 460 censados y que cuenta con numerosos servicios que en otros municipios de su alrededor han ido desapareciendo con el paso del tiempo. Su alcalde destaca que el consultorio médico «funciona perfectamente», cuentan con guardería, un colegio, el CRA Valle de Riaza, que supera los sesenta alumnos, instalaciones deportivas, además de restaurantes y algún que otro pequeño comercio.
En lo que respecta a viviendas disponibles, la demanda resulta mayor que la oferta. Una situación que el Ayuntamiento quiere atajar.Recientemente pusieron en venta tres parcelas destinadas a la construcción de viviendas, si bien Miguel admite que lo ideal sería hacer en mayor medida este tipo de enajenaciones «así como tener una bolsa de alquiler». Sin embargo, se topan con la falta de terrenos: «Nos gustaría sacar el máximo número de parcelas a precios asequibles. Esta será nuestra política».