La matriculación en las etapas de segundo ciclo de Infantil y Primaria ha sufrido este curso un fuerte descenso en comparación con el pasado. Los dos niveles ‘pierden’ cerca de 600 alumnos (593) al pasar de los 28.526 de hace un año a los 27.933 de este, según los datos facilitados por la Consejería de Educación del Gobierno regional con motivo de la vuelta al cole.

Del total de escolares, 19.550 pertenecen a Primaria, que ha sufrido un descenso del 1,8% o 370 estudiantes menos, mientras que la bajada en Infantil resulta más pronunciada y alcanza el 2,7% hasta los 8.200 (-228). Finalmente, en Educación Especial se produce un ligera subida hasta 183.

La caída de matriculaciones se debe a un solo motivo, que es el retroceso de la natalidad, ya que,  la cifra de 593 coincide prácticamente con  la evolución del padrón municipal. De hecho, desde 2013 a 2020 han nacido 800 niños menos, tal y como se puso de relieve en el Consejo Escolar Municipal. Los datos globales, sin embargo, apuntan a un incremento del alumnado del 0,90% al llegar a los 54.251 frente a los 53.765 del pasado ejercicio escolar, según recoge el dossier de presentación del curso de la Consejería de Educación. Los niveles en los que se produce ese incremento se conocer cuando se presenten los datos de la provincia de Burgos.