Los sindicatos y la patronal burgalesa han firmado el que será el primer convenio colectivo que engloba a todos los trabajadores relacionados con el mundo del vino en la provincia y no solo a los de almacenes y distribuidoras, como ocurría hasta ahora.El acuerdo incluye una subida salarial del 6,4% distribuida en los 4 años de vigencia, de 2018 a 2021, y una reducción de 16 horas de jornada, 8 este ejercicio y otras tantas en el último, hasta quedarse en 1.786 anuales.

Los beneficiarios de este pacto laboral se cuadruplican hasta sumar cerca de 800 personas, incluidos los empleados de las bodegas de las denominaciones de origen Ribera y Arlanza, así como las de chacolí de la zona norte.Hasta ahora, en la mayoría de los casos a los elaboradores se les aplicaba el convenio agropecuario y en otros el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), sin que su actividad estuviera recogida en un marco común.Sindicatos y FAE tienen la intención de acometer esta misma tarea regulatoria y de unificación en otros sectores laborales.

Fuentes de la Federación de Industria de UGT explican que los empresarios tendrán «un tiempo» para adaptar progresivamente la equiparación salarial en aquellas categorías con sueldos más bajos, mientras que «en el caso de que no haya tanta diferencia» el texto será de aplicación inmediata.

El convenio de la industria elaboradora, almacenistas y distribuidores de vinos, cervezas, licores y otras bebidas espirituosas, que es su nombre técnico, se ha firmado con incrementos salariales del 1,7% en 2018, 1,8% este año, 1,9 en 2020 y 2% en 2021, con una cláusula de revisión salarial hasta el IPC real en los 4 años con atrasos.

También incluye otras mejoras laborales, como el incremento de la media dieta hasta los 22,17 euros con justificación, el aumento de los días concedidos por determinados fallecimientos y del permiso sin sueldo de 3 a 4 meses, y la acumulación de la lactancia en días completos a petición del trabajador. Por otro lado, incluye un régimen disciplinario propio y un protocolo de acoso en el trabajo, así como la obligatoriedad del plan de igualdad en aquellas empresas con más de 50 trabajadores.

UGT destaca estos avances y sobre todo la inclusión de empresas que hasta ahora no tenían un convenio de referencia. Desde CCOOIndustria también se valora positivamente la ampliación del ámbito funcional del convenio, así como la mejora retribuida y los beneficios sociales incluidos en el texto, firmado ayer en la sede de FAE.