Hace tres meses este periódico alertaba de la grave situación en la que se encontraba la planta de compostaje de lodos de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) y a día de hoy, lejos de mejorar, es de «absoluto colapso». La empresa encargada de su retirada y tratamiento, Facsa, ha remitido hace dos semanas un escrito a la Sociedad Municipal de Aguas en el que habla de una «situación crítica» y advierte de la imposibilidad de explotar «adecuadamente» las instalaciones en dichas condiciones al estar «muy próximas al límite de su capacidad máxima de acopio de lodos». 

En marzo se acumulaban 40.000 toneladas junto a la planta y ahora la empresa las eleva a 62.903, tanto de lodo fresco como compostado, tal y como refleja el informe técnico enviado a la Sociedad de Aguas. En el escrito reiteran que el problema es consecuencia de la no retirada por parte de la anterior adjudicataria hasta noviembre del año pasado, Valoriza Servicio Medioambiental, de los lodos que son de su propiedad, así como la ausencia de «solución» al material acopiado durante el periodo de prórroga contractual anterior a la entrada de Facsa y que es propiedad de la primera empresa, que tras el proceso de fermentación los ha venido vendiendo a los agricultores de la zona como abono para el campo.

(La información completa en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)