Piden 20 años de cárcel para la banda que robaba BMW y Seat

F.L.D.
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La Policía Nacional detuvo el año pasado a los tres procesados por sustraer varios coches de alta gama, uno en Burgos, que desguazaban en una nave de Madrid para vender las piezas

Para desmontar los coches usaban una cizalla hidráulica valorada en 10.000 euros. - Foto: Alberto Rodrigo

Para desmantelar una organización criminal dedicada al robo de coches de alta gama que después desguazaban para vender las piezas en el mercado de segunda mano, los investigadores del grupo de robos de la Policía Nacional en Burgos dedicaron miles de horas al visionado de imágenes y seguimiento de sus miembros. Tras meses de investigación que comenzó con la sustracción de un BMW X5 en un garaje de la capital, lograron detener a 18 personas. Tres de ellas se sentarán el próximo 30 de noviembre en el banquillo de la Audiencia Provincial. Dos de ellos se enfrentan a una pena de seis años y tres meses de cárcel y el tercero en discordia podría pasar más de ocho entre rejas. Además, las indemnizaciones superan los 50.000 euros. 

Según el escrito del Ministerio Fiscal, esta banda tenía su centro de operaciones en una nave industrial ubicada en la localidad madrileña de Villaconejos. Casi toda su actividad delictiva la centraron en la capital de España y sus alrededores, pero a finales del mes de mayo de 2019 actuaron en un garaje de la avenida Reyes Católicos de Burgos. Allí, J.O.D., uno de los cabecillas de la organización, sustrajo un BMW X5. Para ello, reventó el bombín de la puerta y ‘pirateó’ el ordenador de abordo con un sofisticado dispositivo electrónico que desbloqueó el sistema de arranque. 

El acusado condujo el vehículo hasta la lonja de su propiedad, donde lo dejaron ‘enfriar’ hasta constatar que nadie seguiría el rastro. Después lo desguazaron con una cizalla hidráulica valorada en unos 10.000 euros y vendieron las piezas. El seguro pagó al propietario del coche, que denunció además que en el interior había diversos objetos electrónicos, poco más de 16.000. 

Lo que no podían imaginar los ladrones es que un pequeño despiste del encargado de robar y trasladar el coche hasta Madrid les iba a costar tan caro. Tal y como contó este periódico, la Policía Nacional visionó las grabaciones de varias gasolineras cercanas a la capital después de que los dueños les advirtieran de que el todoterreno iba muy justo de carburante. Efectivamente, los investigadores le localizaron en una estación de servicio a escasos kilómetros y ese fue el hilo del que comenzaron a tirar hasta desmantelar toda la red.

Según pudieron determinar, estaba conformada por cinco grandes escalones muy bien definidos. Eran unos especialistas en mecánica, capaces de desmontar un turismo en apenas minutos. En la nave donde operaban, no solo encontraron herramientas especiales -muchas de ellas robadas-, también una plantación indoor de marihuana que les servía como fuente de financiación. Se les imputa una veintena de asaltos similares. 

Según la Fiscalía, J.O.D. realizó el viaje de Burgos a Madrid sin tener permiso de conducir. Es por eso que pide para él siete años y seis meses de prisión por el delito de robo con fuerza continuado y otros nueve meses por circular sin carné. Por su parte, los otros dos acusados, que responden a las iniciales de N.O.D. y S.G.R., se enfrentan cada uno de ellos a seis años y tres meses de cárcel.