El Ejecutivo del PSOE no está dispuesto a rectificar ni la nueva Ordenanza de Movilidad ni el decreto que limita a 9 calles el tráfico de bicicletas por el centro de la ciudad. Un texto, este último, que ha sido el que, en buena medida, ha provocado el molestar entre el colectivo ciclista, que derivó en la concentración de protesta del pasado domingo, y que cabe recordar que tampoco era del agrado de los socialistas ya que en un primer momento el equipo de Gobierno defendió que fueran 35 las calles, plazas, paseos, parques o puentes por las que pudieran circular las bicis. Eso sí, más tarde se vio obligado a ceder después de que Cs pusiera esa condición más restrictiva para votar a favor de la norma en el Pleno del pasado 20 de diciembre.

El alcalde, Daniel de la Rosa, expresó ayer su «profundo respeto»  por la concentración del domingo, a la que acudieron «unas 500 personas para expresar su desacuerdo. Eso es así». Pero dicho eso, afirmó que no tienen ninguna intención de retocar ni la Ordenanza ni el decreto «en el corto plazo». Otra cosa distinta es si se decide hacer cambios al cumplirse un año de la entrada en vigor de la nueva norma. El plazo, este último, que el PSOE y Cs se pusieron para corregir los errores que se detecten.

«Defiendo en su integridad el decreto de las áreas de tráfico restringido», afirmó para dejar claro que el acuerdo alcanzado con Cs está para cumplirlo e incluso por encima del plan que tenía el Ejecutivo socialista de crear itinerarios para que los ciclistas no se tuvieran que bajar de la bici al entrar en el centro histórico.

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