Cinco años después de que Patrimonio Nacional cediera al Ayuntamiento el uso del parque de El Parral por un periodo de 25 años a cambio de su mantenimiento y conservación, se ha elaborado un plan director que tiene como objetivo orientar las actuaciones y los usos de este emblemático pulmón verde para los próximos 10 años.
La Concejalía de Medio Ambiente encargó su elaboración a una empresa especializada y el resultado se presentó hace unos días a responsables de Patrimonio Nacional por los autores y técnicos municipales después de realizar una visita in situ para comprobar su estado de conservación.
Los técnicos de Patrimonio Nacional realizaron algunas objeciones al documento, que el área de Medio Ambiente se ha comprometido a estudiar, dado que hay una "buena sintonía entre ambas partes". El organismo del Estado sigue sin ver con buenos ojos que se mantengan las barbacoas repartidas por numerosos puntos del parque y muchas de ellas inutilizadas por el paso del tiempo. Las actuales parrillas no cumplen con la normativa y antes o después deben ser retiradas. Sin embargo, el concejal de Medio Ambiente, Josué Temiño, indicó que los nuevos modelos de barbacoas como los instalados en Fuentes Blancas son totalmente seguras y así se ha trasladado.
Patrimonio Nacional también ha hecho algunas sugerencias sobre los accesos y los caminos interiores, así como que se amplíe el estudio de plagas y enfermedades de los árboles.
Paralelamente ha sugerido la elaboración de un plan de emergencias, dado que el Ayuntamiento solo redacta uno para el día del Curpillos. En un futuro está previsto el cierre por la noche con puertas (las tendrá que colocar el Ayuntamiento) y establecer un horario para el uso. "Vamos a trabajar esas sugerencias de Patrimonio Nacional y posteriormente les enviaremos el borrador definitivo. Si ambas partes estamos de acuerdo se convocará a la Comisión de Arbolado y luego se someterá a información pública", añadió Temiño.
El plan director del Parral incluye un diagnóstico del arbolado para cada uno de los árboles del parque en el que se establece la prioridad en las actuaciones sobre el mismo e incluye una ficha técnica, así como las necesidades a corto, medio y largo plazo.
El plan director es un documento de futuro sin perjuicio de que se puedan realizar actuaciones urgentes por necesidades sobrevenidas como fue el caso de la tala de un centenar de árboles debido al riesgo que existía. Tanto Patrimonio Nacional como el Ayuntamiento son conscientes de que habrá más talas debido a que hay chopos de producción con más de 80 años y su vida útil es la mitad.