El San Pablo tuvo que sufrir hasta los últimos segundos para sumar una victoria clave ante el MoraBanc Andorra. El conjunto burgalés se sobrepuso a su inexplicable falta de acierto en el tiro y, a base de coraje, consiguió doblegar a un rival directo por los puestos europeos. La primera parte estuvo marcada por la mala puntería de ambos y entre la espesura de los dos equipos, la mejor noticia fue que los pupilos se marcharon por delante en el marcador (30-24). Tras el paso por los vestuarios, el San Pablo dio un arreón y todo apuntaba a que el duelo se iba a resolver sin problemas del lado azulón, pero se complicó la vida con algunos errores y no supo rematarlo hasta unos instantes finales de infarto. Huskic fue el mejor del San Pablo con 18 puntos, 11 rebotes y dos asistencias para un 23 de valoración.