Teresa, Sol, Iván, Borja... Cuatro nombres propios que representan hoy a miles de burgaleses que desde el pasado domingo tienen prohibido salir de sus casas tras decretarse el estado de alarma. Hoy son ellos, pero mañana puedes ser tú quien nos cuente la experiencia. Iván y Borja, por ejemplo, han jugado al monopoly con sus padres y ante el impedimento de hacer ejercicio en la calle utilizan el pasillo para no perder la forma. Sol nos lanza un mensaje de optimismo con su arcoiris, mientras que Julia deja otro no menos importante con la colaboración de su perro: 'si él puede aguantar sin salir, tú también'. 
Las comunidades de vecinos también tienen actividad conjunta, son muchas en las que a la espera de la hora del aplauso a los sanitarios amenizan con música y luces. Imaginación al poder.

El optimismo se hereda
No hay mejor demostración de optimismo que el que Sol muestra en su dibujo. Durante esta cuarentena obligatoria por el coronavirus decretada por el Gobierno, ha dejado durante unos minutos la tarea del cole para dibujar un arcoíris y expresar su optimismo ante todo lo que está viviendo junto a su familia. Residen en la calle Serramagna, en el barrio de San Pedro de la Fuente. Y su madre, Teresa, está muy orgullosa del optimismo de su hija. Seguro que será verdad y todo va a salir bien. ¡Claro que sí!

Solidaridad visual y musical
Música y luces para animar hasta que a las ocho el domingo se aplaudió a los trabajadores sanitarios. Un vecino hace de DJ en la calle José María Francés Gil (S-4) y ameniza la espera con un repertorio que incluye hasta música infantil. Anoche guardaron a las ocho un minuto de silencio por las víctimas. Cada día se animan más vecinos con todo tipo de luces.

Un vecino hace de DJ en la calle José María Francés Gil (S-4) y ameniza la espera hasta el aplauso sanitario.

Viernes de ayuda
Teresa Martín está preocupada. Trabaja en su despacho pero al llegar a su hogar piensa en quienes están solos y tienen dudas. Y por eso, en su perfil de Instagram @vecinosonlineburgos está dispuesta a ofrecer su ayuda e información a quien la necesite.

Un café para empezar
Soraya Ortega comenzó el primer día de ‘encierro’ en casa con un café con leche, preocupada porque durante toda la semana estuvo en el hospital cuidando de un familiar enfermo. El domingo, al acabar la tarde, se unió al aplauso general a los sanitarios desde la ventana de su domicilio.

Juegos en familia
¿Habrían jugado Víctor y Borja al monopoly alguna vez? Sus padres lo rescataron del baúl de los recuerdos -es en pesetas- para ocupar algunas horas en su primer día en casa a resguardo del coronavirus. Y como no pueden salir a la calle, se entrenan con estiramientos en el pasillo de su casa, en Gamonal.

Juegos, dibujos, mensajes...

Asedio al virus 
Sandra, Gael y Vega cercan al coronavirus. El peque, de tres años, y su hermana, de uno, utilizan todos sus juguetes para impedir el avance del virus (la pelota rosa), con la firme intención de impedir que pase a su casa. Con semejante línea de defensa, seguro que se saldrán con la suya. 

Cuarentena para todos
Los quince días sin salir de casa son una obligación para todos, salvo excepciones. Una de ellas es la de las mascotas, a las que sus propietarios pueden sacar de manera prudente. Julia Beltrán consigue que su perro se tranquilice y después de varios intentos de acercarse a la puerta de casa, termira por acomodarse en su rincón y aguardar paciente el momento en que le toque salir. Su propietaria lanza este mensaje: "Si ellos lo entienden, tú también, ¡quédate en casa!".

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