El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Burgos tiene preparadas decenas de cambios en la Ordenanza de Movilidad que entró en vigor hace casi un año. Buena parte de las modificaciones que se plantean en el texto están enfocadas a corregir definiciones o términos y evitar así problemas jurídicos, pero también se incluye alguna novedad que no se contemplaba hasta ahora. Entre otras, la de permitir a los repartidores de bicicletas, como los de las plataformas Glovo o Deliveroo, circular por calles peatonales o Áreas de Tráfico Restringido (ATR).

Aunque los cambios que se proponen tienen aún que ser debatidos, el borrador que el Ejecutivo ha trasladado al resto de grupos políticos para que realicen sus aportaciones ve la necesidad de incluir este punto en la ordenanza para diferenciar a los llamados ‘rider’ (repartidores) del resto de usuarios de bicicletas. Los primeros sí podrían circular por las calles peatonales, a un máximo de 10 kilómetros por hora, y los segundos solo por las llamadas Áreas de Tráfico Restringido (más allá de por la calzada o el carril bici).

El borrador también incorpora algunas obligaciones ya recogidas por la normativa de la DGT pero que no figuraban en la Ordenanza de Movilidad. En el apartado de infracciones se añade, por ejemplo, que circular con un patinete eléctrico sin casco o con auriculares llevará aparejada una sanción de 200 euros y hacerlo superando las tasas de alcohol permitido o «de forma temeraria» supondrá una multa de 500 euros.

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