Incertidumbre máxima ante el inicio de la liga

J.A.D.C.
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Alberto Suárez continúa preparando a su equipo para el debut liguero del próximo día 2, pero duda también que casos como los de Santander o Logroño vayan a ser los últimos

Alberto Suárez observa desde la banda un entrenamiento del equipo - Foto: Julio Calvo

Confía en que la situación transcurra con toda la normalidad que pueda darse en estos difíciles momentos, pero lo cierto es que, como avisa el técnico del Blasgón y Ceres, Alberto Suárez, algo en su fuero interno incita al asturiano a creer que la liga no comenzará el próximo día 2 de septiembre. «Por un lado algo me anima a pensar que iniciaremos en la fecha marcada», relata, «pero no las tengo todas conmigo».

Lo asume tras valorar para DB el reciente contagio por COVID-19 surgido tras el encuentro amistoso celebrado el pasado fin de semana entre BM Sinfín y BM Logroño en Santander. Un escenario de momento fortuito, pero que, como ha destacado, podría no ser el último que aparezca antes de que se alce el telón del nuevo curso 2021.

En esa situación, al menos, un respiro. El de que el confinamiento de Aranda impidiera a los ribereños disputar lo que de inicio iba ser un torneo triangular. Un hecho que, por fortuna -y visto ya en perspectiva-, libró a la entidad ribereña de la difícil situación que tanto sus homónimos cántabros como riojanos deberán ahora afrontar.

Y es que, en total, serán catorce días los que tengan que mantenerse confinadas ambas plantillas. Un dato que pondría como fecha de liberación a los dos clubes el primer día de septiembre, pero también una marco excesivamente cercano al día del estreno liguero (teóricamente al día siguiente), como para no tener alguna alternativa planificada ya de antemano.

Es eso, precisamente, lo que más preocupa de forma inminente al preparador gijonés. También por lo que añade que, «no creo que este sistema de competición (grupo único), se pueda jugar. Estas cosas van a seguir pasando y, aunque nosotros hemos sido los primeros en estar confinados, no creo que vayamos a ser los últimos».

Así, como añade, el virus va a seguir conviviendo con la sociedad. «Le va a pasar mucha gente y durante muchos momentos», sentencia, «por lo que si quieren intentar que se juegue, va a tener que ser de otra forma». Ahora, como apunta, «no entiendo tampoco por qué no están ya dándole vueltas al tema acerca de qué hacer con todo esto».

AMISTOSOS. Perdida la práctica totalidad de la planificación veraniega (el equipo ribereño tendría que haberse enfrentado a día de hoy ya dos veces a BM Sinfín, BM Logroño, y a Torrelavega en la tarde de ayer miércoles), el Blasgón y Ceres mira ahora en perspectiva cómo recomponer la última semana de trabajo previa al inicio liguero. Máxime, cuando tras dar por abortados esos cuatro partidos señalados, recientemente Nava, y «por incompatibilidades en el calendario», daba también por anulada la cita de este sábado con los arandinos en Campaspero.

En cuanto al duelo del día 29 ante el UBU San Pablo, decir que el duelo ante los capitalinos (a la espera del fin del confinamiento ribereño), se mantiene. Es, por el momento, el único compromiso activo que queda vivo en la hoja de ruta del club.