La hora del Castillo

A.S.R.
-

El Ayuntamiento convocará un primer concurso de ideas para el adecentamiento arquitectónico del centro de interpretación, el pozo y una recepción de visitantes y un segundo para su gestión y dinamización turística

El acondicionamiento y equipamiento del centro de interpretación de la fortaleza se incluye entre las actuaciones a realizar. - Foto: Patricia

El Castillo vive horas muy bajas. Se descuidó su conservación y se abandonó su dinamización turística perdiendo poco a poco el atractivo que había ganado desde la rehabilitación realizada en 2003. Su clamor pidiendo auxilio ha llegado al equipo de Gobierno de Daniel de la Rosa. Sus concejales se han arremangado y se han puesto a trabajar en serio para devolver su valor a este patrimonio capitalino. El concejal de Fomento, Daniel Garabito, el de Turismo, Leví Moreno, y el director de Proyectos de Promueve Burgos, Alberto Molina, se reunieron la semana pasada para sentar los cimientos de este rescate, que, esta vez sí, parece imparable. 

Se convocará un concurso de ideas para la conservación y recuperación de las infraestructuras de este complejo y un pliego para su dinamización turística y cultural con los ojos puestos en la primavera de 2021 como meta, aunque no las tienen todas consigo. 

Por partes. El primer paso es la consolidación arquitectónica de la fortaleza. Moreno explica que el proyecto debe contemplar la adecuación del centro de interpretación. Ahora, entre otros problemas, tiene goteras en el tejado, necesita un sistema de calefacción y aire acondicionado y un equipamiento adecuado y actualizado para que se convierta realmente en un espacio que divulgue la historia de este lugar. "Entrar ahora allí es deprimente y se pueden hacer muchas cosas con las nuevas tecnologías como la recreación de la voladura u otros momentos importantes", sostiene el titular de Turismo. 

La actuación alcanzaría al pozo, con su adecentamiento y la renovación de la iluminación, tanto el tramo que sigue el recorrido turístico actual como el que conduce hasta el fondo, así como una señalización de emergencia. La idea no es abrir esta zona a todo el mundo, pero sí que puedan acceder con garantías profesionales, expertos y otros investigadores. 

El proyecto deberá contemplar además la habilitación de una zona de recepción que dé una bienvenida digna a los turistas. Esto incluye unos baños -"es primordial"-, una taquilla para la venta de entradas, una tienda donde poder comprar agua, recuerdos...

Y, al mismo tiempo, una vez asegurado este acicalamiento de las infraestructuras, se redactaría un pliego para devolver la vida cultural y social al baluarte. 

Leví Moreno no se quiere pillar los dedos con los plazos. Las cosas en palacio van despacio. Pero sí desea poder brindar una atención completa y sin medias tintas, con todos los servicios, a los visitantes que lleguen a Burgos en la Semana Santa de 2021. 

De presupuesto y financiación también es pronto para hablar. El concejal socialista confía en que el acuerdo de Presupuestos con Ciudadanos, que incluyó entre sus condiciones un plan para la dinamización del Castillo, permita aumentar la partida prevista. "Prácticamente todo lo que tenemos ahora se lo come la seguridad", observa y manifiesta su fe en la captación de subvenciones tanto estatales como europeas, "igual que hubo en su momento en el año 2003". 

Descartada sí queda la presentación de este proyecto a las ayudas del 1,5% Cultural del Gobierno en la convocatoria de este año. El plazo se termina el 12 de marzo y no llegan a tiempo. 

Mientras esta maquinaria se pone en marcha, queda por ver cómo se resuelve este año.