Este curso, la clase de los patos de la Escuela Infantil Municipal Aranda de Duero, los pequeños de dos y tres años, han tenido unos compañeros muy especiales. Cada mes han conocido la figura y la obra de Van Gogh, Leonardo Da Vinci, Edward Munch, Miró, Antonio López o Monet. Su tutora, Noelia García, se puso como reto aprovechar el Arte como herramienta transversal para aprender múltiples disciplinas.
«Yo soy muy fan del arte y quería transmitírselo a los niños, pero no que se aprendiesen una obra y un artista sino que le sacasen todo su jugo y poder trabajar conceptos, nociones,...», intenta resumir Noelia un proyecto que va más allá de mirar un cuadro. Con estas grandes obras pictóricas, estos pequeños artistas se acercaban a distintas asignaturas, como «lógica matemática, con El barco en reposo de Klee ven las formas, los tamaños, el conteo, si es más largo qué, si está más cerca,... Las emociones con La Gioconda le poníamos diferentes rostros, el miedo con El Grito, que no pasa nada por sentirlo».
La elección de las obras la realizó la propia creadora del proyecto, en base a unos objetivos marcados por el programa lectivo del año. «Hemos elegido los cuadros por la fama que tienen, para que cuando vayan a casa se lo puedan contar a sus padres, y como cada mes tenemos una unidad didáctica, por ejemplo, sobre la casa, pues ese mes toca El dormitorio de Arles de Vincent Van Gogh, algo relacionado para que tenga un mismo contexto», explica Noelia García.
Sorprendía acudir a un día de clase y comprobar cómo los alumnos conocían el título del cuadro, su autor, de dónde era «cuando hablábamos de cada pintor teníamos que localizar en el mapamundi de dónde era», y detalles de lo más diverso sobre la propia obra y su creador. Tanto que muchos adultos podrían aprender algo de Arte de este pequeños, o al menos recordar lo que aprendieron en su época como alumnos.
Este acercamiento a los mejores creadores y sus obras no se quedó en la teoría, sino que llevaron a cabo las recreaciones de todos los cuadros estudiados. «Hemos intentado recrearlas dentro de sus posibilidades y no hemos usado solo materiales destinados al arte, por ejemplo, para el jarrón de Los Girasoles hemos usado una patata», relata la tutora, rodeada de curiosas ‘copias’ que convertían el aula en una auténtica pinacoteca.
Este proyecto ‘Desde el otro lado del cuadro’ de la Escuela Infantil Municipal Aranda de Duero, gestionada por la filial de Clece, Koala Escuelas Infantiles, logró una mención especial en el VI Premio Escuela Infantil de carácter nacional. Su directora, Miriam Perera, destacó que «era la primera vez que presentábamos un proyecto y es una satisfacción ver que se reconoce el trabajo».