Los centros sanitarios de Sacyl en la provincia tienen a más de 200 profesionales de baja por covid-19 desde el pasado noviembre, como se constata en los datos oficiales que facilita la Junta a diario en la web dedicada a la pandemia. Ahí se comprueba que se cuentan por decenas los efectivos, sanitarios y no sanitarios, que se están contagiando en otoño e invierno, pero la mayoría vuelven a estar de alta al cabo de un mes. Lo cual no impide que, sin embargo, la información oficial siga indicando que hay una bolsa permanente de unas 200 personas «en aislamiento» desde primeros de noviembre.

Este miércoles, por ejemplo, la web oficial indica que 894 trabajadores de Sacyl han dado positivo desde marzo, de los cuales 282 están de baja y 612 se han podido reincorporar a sus puestos. Si se comparan estos datos con los de hace dos meses, por ejemplo, se observa que, entonces, eran 688 los infectados, con 235 de baja y 453 dados de alta. En un análisis más detallado de la diferencia entre sendas fechas, se constata que la mayoría de los infectados en ese período (204 personas) han podido volver ya a sus puestos (157), mientras que algo menos de la cuarta parte (47) sigue dando positivo cuando se le hace una prueba diagnóstica para confirmar si su proceso infeccioso sigue activo. Y, así, el total de profesionales que siguen de baja, se mantiene por encima de 200 desde hace más de dos meses.

Como ha sucedido desde el comienzo de la pandemia, la categoría profesional más afectada es la de Enfermería. Acumulan el 36% de todas las infecciones diagnosticadas (323 sobre un total de 892) y no es casual: los pacientes con coronavirus requieren de muchos cuidados de enfermería, por lo que son profesionales más expuestos a la infección que los de otras categorías. Así, les siguen los médicos, con 189 contagios confirmados (uno de ellos, un especialista de Atención Primaria, falleció en otoño), el 21% sobre el total; y, a continuación, los técnicos en cuidados auxiliares de enfermería: 180 de las infecciones detectadas (una de ellas, trabajadora de Fuente Bermeja, falleció en primavera), alrededor del 20%.

El resto de los positivos están repartidos: desde los administrativos hasta el personal en formación.