Aunque algunos ciudadanos tienen la creencia de que el Ayuntamiento es el responsable de cualquier accidente que puedan sufrir en la vía pública la realidad no siempre responde a sus expectativas. En el área de Patrimonio están acostumbrados a recibir múltiples peticiones pecuniarias y recientemente han sentido un importante alivio al conocer que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo Número 2 de Burgos ha rechazado indemnizar a una mujer que sufrió una caída en la Plaza 2 de Mayo y que exigía que se le compensara por las heridas sufridas con 67.334 euros.

Ninguna de las partes cuestiona que el percance se produjo y que provocó que la mujer se rompiera la cadera, pero el magistrado defiende que la obligación del Ayuntamiento de conservar y mantener en buen estado las vías púbicas «no es un deber absoluto hasta el punto de que pueda reclamarse a la administración por cualquier caída causada por defectos mínimos».

Pero es que además, en este caso concreto, el juez recuerda a la víctima que se cayó en un lugar por el que, si bien se puede transitar, «no es la zona habilitada por el Ayuntamiento» para ir de un lugar a otro de la plaza. Porque en lugar de utilizar los caminos de baldosas establecidos (los que la rodean o la cruzan), lo que hizo la mujer fue «atajar» y «atravesar» la plaza por la zona de los columpios o por el césped (no quedó demasiado claro) y por ahí entró a un espacio donde el pavimento es más liso. Llovía de manera abundante, pisó la zona encharcada y ahí «el deslizamiento es casi inevitable», relata el magistrado. En otras palabras,  su conducta «carecía absolutamente de la diligencia que le era exigible» y, por tanto, no cabe buscar responsabilidades en otros.

(Más información, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)