La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, anunció hoy en Valladolid que la Junta inicia la tramitación formal de la futura ley de atención residencial con la publicación en Gobierno Abierto de la consulta pública que precede a la elaboración del anteproyecto normativo. Se trata de una ley que, reiteró, hará hincapié en la importancia del proyecto de vida de las personas, en el que los mayores y dependientes en el centro del sistema, gracias al impulso de las unidades de convivencia en las residencias.

Con motivo de la inauguración de la jornada ‘En mi hábitat’, un foro para el análisis y el debate organizado en colaboración con el clúster de Hábitat Eficiente (Aeice), Blanco subrayó que la publicación del anuncio en el Gobierno Abierto supone el "pistoletazo de salida" que marca el inicio de la tramitación formal de la ley. Blanco apostó por un modelo de atención residencial en que el centro sea una "prolongación" de lo que es su hogar y vivienda. "Hay que adaptar un entorno a las necesidades de atención, físicas y cuidados que requieran pero haciendo que ellos se sientan importantes y comprueben que su vida continúa en un lugar diferente pero adaptado a sus necesidades", aseveró.

La consejera destacó, según recogidas por la Agencia Ical, que la pandemia del COVID ha demostrado el acierto del modelo de atención residencial basado en las unidades de convivencia en el que lleva años trabajando la Junta. Precisó que son módulos dentro de los centros residenciales con un máximo de 16 personas en cada unidad que cohabitan y desarrollan sus propios proyectos y que luego tienen una integración con todo el centro y otros usuarios en las diferentes unidades. "Son espacios similares a los domésticos pero en el interior de las residencias para que el usuario siga manteniendo su intimidad, el control de su vida y su capacidad de elección, participación en actividades cotidianas e interacción social", precisó.

Isabel Blanco mostró el compromiso "firme" de la Junta con este modelo de atención, tal y como queda demostrado con la transformación llevada a cabo en los diferentes centros de titularidad de la Gerencia regional de Servicios Sociales para habilitar unidades de convivencia. También mencionó la nueva residencia que ya se edifica en Salamanca, con una inversión prevista de 15,21 millones de euros, además de la intención de financiar con los fondos europeos de resiliencia para la construcción de dos nuevos centro en Ávila y Zamora en los tres próximos años, que contarán con unas 200 plazas en cada caso.  

Unos edificios que la consejera apuntó que deben ser sostenibles, energéticamente eficaces para ayudar a luchar contra el cambio climático y que integren todas las nuevas tecnologías que son tan importantes y necesarias que han sentado las bases durante los meses de pandemia. Una apuesta que se traduce en que la Consejería de Familia promoverá, en colaboración de Aeice, un concurso de ideas para "profundizar" en las soluciones espaciales, arquitectura, construcción e ingeniería que se adapten a ese nuevo modelo de atención de cuidados de larga duración.

"Los profesionales de la arquitectura, ingeniería, construcción y operaciones  sois importantes e imprescindibles para desarrollar estos proyectos y queremos contar con vosotros", manifestó Blanco en presencia del director del clúster de Hábitat Eficiente, Enrique Cobreros. Es por ello que el concurso tendrá una dotación económica de 21.000 euros, que se repartirán entre los nueve premios de las tres categorías diseñadas como edificios y espacios interiores; la ciudad, comunidad y espacios exteriores y el mobiliario, el equipamiento y las soluciones tecnológicas.  

El director del clúster de Hábitat Eficiente consideró que el concurso es una oportunidad para el sector del hábitat y de la construcción de reflexionar en torno a soluciones innovadoras que beneficien a las personas mayores y dependientes en su salud y bienestar.  

“El modelo de atención centrada en la persona necesita de soluciones innovadoras al servicio de ese modelo asistencial. Nuestro sector es responsable de acompañar a cada persona en las decisiones que tome respecto a su proyecto de vida y en proporcionar soluciones adecuadas en los espacios interiores y exteriores, así como en equipamientos y herramientas tecnológicas, para apoyar que la vida de las personas mayores y dependientes sea lo más independiente posible”, indicó.

Dependencia 5.0

Un modelo que la consejera reconoció que se enmarca en el sistema de Dependencia 5.0 que la Junta pretende implantar en Castilla y León. La idea, según explicó, es que la gestión de los servicios sociales de la Comunidad continúe a la vanguardia en España o siga a la cabeza en la cobertura de plazas residenciales (un 7,84 por ciento, lo que supone tres veces y media más que la media nacional) y de estimular al sector privado a acometer también esa transformación del modelo de cuidados de larga duración.

Una transformación que, precisó, también debe llegar a los domicilios de las personas mayores que opten por continuar en sus hogares, gracias a la teleasistencia avanzada y la tecnología que esté al servicio de los usuarios. En este sentido, se refirió a uno de los proyectos piloto más importantes que promoverá la Consejería, con por robots inteligentes que asistirán a las personas dependientes o a sus cuidadores en actividades sencillas del día a día, ayudarán a implantar la teleasistencia avanzada y servirán como "compañeros" de ocio y entretenimiento con juegos, además de motivar a sus usuarios para practicar ejercicio físico y mental.