César Rico califica de "despropósito" el "bandazo" de sus compañeros vascos con Garoña

ICAL
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El presidente de la Diputación Provincial pedirá explicaciones a los dirigentes del partido en Génova y Vitoria

El presidente del PP burgalés, durante una sesión plenaria en la Diputación. - Foto: Patricia

El presidente de la Diputación Provincial y del Partido Popular de Burgos, César Rico, ha calificado de “inexplicable” y “despropósito” el “bandazo” de sus compañeros populares en el Parlamento vasco que se sumaron, por vez primera, al rechazo de la reapertura de la central de Garoña. Rico ha mostrado así su “sorpresa” con la decisión del PP vasco al recordar que, hasta ahora, había sido “respetuoso” con Castilla y León, el PP regional y Burgos.

El presidente provincial ha considerado que se trata de una decisión compleja y difícil de explicar porque, a su juicio, “deslegitima” al Gobierno de la Nación. No en vano, ha recordado que la resolución pactada solicita a la Comisión Europea que supervise la eventual reapertura de la instalación nuclear y garantice que cumple todas las medidas de seguridad impuestas después del accidente de Fukushima. “Parece que ponen en duda el informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN)”, ha precisado.

Rico ha criticado igualmente la postura del PP vasco porque la central está situada en Castilla y León, por lo que no tiene legitimidad para reclamar algo. Tampoco se ha olvidado de que la iniciativa cuenta con el respaldo de EH Bildu. “Puedo entender este voto de un partido nacionalista pero no del Partido Popular del País Vasco que desligitima el veredicto de un organismo español independiente”, ha aseverado.

El presidente de la institución provincial ha anunciado que mañana se pondrá en contacto con dirigentes del PP en la sede nacional del partido pero también con responsables de la formación en el País Vasco. “Quiero que intenten explicarse y justificar su decisión, aunque lo veo imposible”, ha añadido.

Rico ha recordado que el presidente Mariano Rajoy se comprometió, durante una visita a Garoña, a que iba a poner todas las herramientas necesarias para poner en marcha la central nuclear. “Es una cuestión que afecta a la política energética de España pero, sobre todo, interesa a la economía y a un millar de empleos de Castilla y León y de la provincia de Burgos. Y con eso no se juega”, ha sentenciado.