Los vecinos de San Cristóbal empiezan la cuenta atrás para poder ver ejecutada la ansiada reforma del centro municipal. Los trabajos han arrancado esta semana tras un retraso de cinco meses, que ya estaba empezando a preocupar. Y es que las obras fueron adjudicadas en junio a la empresa Restauraciones Verticales por un importe de 205.000 euros y un plazo de ejecución de medio año.
Sin embargo, la empresa alertó al Ayuntamiento de que tenía problemas con el acopio de material al entrar en temporada de verano y estar algunas de las fábricas cerradas a lo que después se unió la escasez de materiales en el ámbito de la construcción. También llegó a plantear un modificado del contrato ante la complejidad de encontrar los materiales elegidos en el proyecto pero no se aceptó aunque sí se llegó al acuerdo de cambiar las losetas de la fachada por otras tras un informe técnico. El área de Patrimonio Municipal confiaba en que la obra arrancara en septiembre pero se le concedió una ampliación del plazo de 82 días por la falta de suministros y no ha sido hasta esta semana cuando la adjudicataria ha comenzado a colocar el andamiaje para iniciar los trabajos.
La remodelación de este edificio es una demanda de hace años de los vecinos de San Cristóbal. Se construyó en 1987 y ha sufrido varias intervenciones. Las fachadas son de cemento pintado y carecen de aislamiento, lo que hace que se produzcan humedades. Lo mismo sucede con la carpintería que está muy expuesta a la lluvia y la escorrentía discurre por las fachadas. También hay condensaciones en las ventanas, especialmente en las que dan al norte. La cubierta del edificio consta de una chapa de acero lacado rojizo que no cuenta con una protección adecuada y en el interior varias dependencias presentan grietas. La idea es recubrir el edificio con una fachada ventilada de gres porcelánico rectificado antigrafiti. También se reparará la cubierta y se mejorarán los desagües de los pesebrones para evitar que se filtre el agua de lluvia.
Cierre hasta Semana Santa. El centro municipal no había retomado la actividad tras cerrar por la pandemia y como consecuencia de las obras no se volverá a abrir al menos hasta después de la Semana Santa del próximo año. La concejala de Patrimonio Municipal, Sonia Rodríguez, aseguró que así se ha acordado en una reunión con el consejo de barrio, dado que las obras son incompatibles con el desarrollo de actividades al afectar al exterior del edificio pero también a varias dependencias interiores.
Este hecho causará un perjuicio a los residentes en el barrio de San Cristóbal debido a que el centro se ha convertido en un espacio de convivencia para mayores y pequeños y al realizarse numerosas actividades, de hecho lo usan una media de doscientas personas al día. Lo cierto es que en los últimos años eran numerosas las quejas que había formulado el consejo de barrio debido al deterioro de las instalaciones. Había grietas, humedades y condensaciones en algunas de las aulas, así como desprendimientos en los falsos techos y fallos en la calefacción que en algunos casos condicionaban el normal desarrollo de las actividades.